Tegucigalpa. – Tras el hallazgo de que 13 hondureños habían perecido en el trágico incidente que cobró al menos 40 vidas, el cónsul de Honduras en México, Héctor Amador, ha confirmado que hay ocho migrantes aún con vida en el centro de detención en Ciudad Juárez.
El cónsul hondureño afirmó que “La última información confirmada al más alto nivel es que hay ocho compatriotas sobrevivientes, no se proporcionan los nombres para no crear confusión”.
Amador confirmó que si son unos 13 hondureños, pero no están fallecidos, estaban presentes en el lugar del incendio. Dijo que hay ocho compatriotas vivos y se desconoce el paradero de cinco más.
Los 13 hondureños que fallecieron en el incendio fueron confirmados en el comunicado previo del vicecanciller Antonio García. Horas después, corrigió el registro y afirmó que aún existe la posibilidad de que todos sigan con vida, pero deben esperar.
“Todavía hay un rayo de esperanza. Información nueva llegó del Instituto Nacional de Migración de México a Cancillería de México que aún no hay confirmación oficial de todos los fallecidos. Esperemos”, solicitó.
La estación de bomberos del Instituto Nacional de Migración (INM) en Ciudad Juárez, en la frontera con Estados Unidos, resultó en la muerte de 40 migrantes, según el gobierno mexicano, en las últimas horas.
A pesar de que el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, había señalado en su rueda de prensa matutina que habían muerto 39 migrantes, Jess Ramírez Cuevas, vocero de la presidencia, puntualizó que la cifra es de 40.
Ramírez Cuevas publicó en sus redes sociales: “El presidente López Obrador lamentó el fallecimiento de 40 migrantes por el incendio de un albergue en Ciudad Juárez, Chihuahua”.
El mandatario precisó que el hecho ocurrió a las 21:30 horas. metro. (04:30 GMT) en Ciudad Juárez, en la frontera de la ciudad mexicana con El Paso, Texas, donde la mayoría de las 37 víctimas mortales eran de América Central, el número inicial de muertos fue de 37. Venezuela es otro.
Según López Obrador, el incendio fue provocado por una protesta de migrantes.
En su conferencia de prensa matutina, dijo: “Esto tuvo que ver con una protesta que ellos iniciaron, a partir, suponemos, de que se enteraron de iban a ser deportados, movilizados, y como protesta, en la puerta del albergue pusieron colchonetas y les prendieron fuego”.
Según Ramíez Cuevas, el mandatario “informó que el hecho ocurrió a raíz de una protesta y que el director del INM (Francisco Garduo) y la FGR (Fiscalía General de la República) ya están investigando para determinar las responsabilidades”.
Agentes del INM acababan de terminar una misión para despejar las calles de mendigos que eran migrantes antes del incidente.