En una serie de ataques llevados a cabo por las fuerzas rusas este viernes, varias ciudades de Ucrania, incluida la capital, Kiev, se vieron afectadas.
Según informó el alcalde de Kiev, Vitali Klitschko, a través de su cuenta de Telegram, uno de los lugares alcanzados fue un hospital infantil, aunque no se han reportado daños o heridos en el edificio.
Ante la situación, la administración militar de la ciudad activó la alerta aérea y emitió un llamado a los ciudadanos para que se desplazaran a los refugios de urgencia.
Las Fuerzas Armadas, a través de Telegram, también hicieron un llamado a la población para que no ignorara las advertencias y se mantuviera alerta ante la alerta aérea en todo el país.
En Kiev, los sistemas de defensa aérea respondieron de manera efectiva a los ataques, según informó la administración militar de la ciudad.
Sin embargo, en diferentes lugares del país, los bombardeos rusos han dejado un saldo de cuatro civiles muertos y 41 heridos desde ayer.
Una de las regiones más afectadas fue Zaporiyia, donde se registraron bombardeos en 23 localidades, resultando en la muerte de dos personas y 21 heridas.
Además, las autoridades regionales recibieron 51 informes de edificios e infraestructuras destruidas en esa zona.
Entre los objetivos impactados se encuentra el hotel Reikartz, ubicado a orillas del río Dnipró, el cual suele ser utilizado frecuentemente por personal de la ONU.
Asimismo, la región de Jersón sufrió fuertemente los ataques, registrando un total de 273 bombardeos rusos.
La situación continúa siendo motivo de preocupación, ya que los ataques indiscriminados están generando daños a infraestructuras y poniendo en riesgo la vida de los ciudadanos ucranianos.
Las autoridades locales y la comunidad internacional instan a Rusia a cesar inmediatamente estas acciones hostiles y buscar una solución pacífica a la crisis.
