Tegucigalpa – La ministra de Finanzas, Rixi Moncada, ha arremetido este viernes contra lo que llama «actores perversos» dentro de la administración pública, acusándolos de ser responsables del retraso en la llegada de las placas vehiculares y la controversia que ha surgido en torno al desabastecimiento, que ha llevado a la emisión de placas en papel.
A través de su cuenta de Twitter, Moncada ha sostenido que la liquidación de fideicomisos ha sido clave para cortar lo que ella describe como un «esquema de corrupción pública-privada».
Haciendo hincapié en que la tasa vehicular era motivo de vergüenza y que está siendo objeto de investigación, la ministra ha afirmado que el atraso intencional de la emisión de placas vehiculares fue causado por ciertos individuos dentro de la administración pública que aún permanecen en sus cargos.
El Instituto de la Propiedad (IP) tenía un fideicomiso vigente, establecido en 2013, que estaba encargado, entre otras cosas, de financiar la producción de placas.
Este fideicomiso finalizó en mayo de 2023, y aunque en junio el IP inició un nuevo proceso de licitación, el desabastecimiento de placas ya era una realidad.
El presidente del consejo directivo del IP, José Carlos Cardona, ha explicado que aunque se tenía consciencia de que en este periodo del año podía haber un desabastecimiento, la existencia del fideicomiso vigente impedía una solución inmediata.
El debate en torno a las placas vehiculares pone de manifiesto una serie de desafíos y complejidades en la administración pública, desde la gestión de fideicomisos hasta la lucha contra la corrupción que ha afectado a la emisión de documentos esenciales para los conductores en el país.
