Estados Unidos se asoma nuevamente a un posible cierre gubernamental este sábado.
La división entre republicanos y demócratas dificulta aprobar fondos para el año fiscal 2023 antes de que expiren.
Aunque los analistas conciben que un cierre a corto plazo no tendría un gran impacto, sí advertían consecuencias no triviales con el parón de 2019.
El economista Gilles Moëc calculó que ese cierre de 35 días le costó al país entre el 0,1% y 0,8% del PIB trimestral, según cómo se escalaran los datos.
Si el cierre actual se prolonga, podría complicar la labor de la Reserva Federal al carecer de indicadores económicos clave para decidir sobre tipos de interés en noviembre.
Por ahora, los legisladores tienen hasta las 23:59 horas para negociar una solución o la mayor parte del gobierno federal cerrará sus puertas.
