Según el gobernador regional Yuri Malashko, otras cinco personas resultaron heridas y tuvieron que recibir tratamiento hospitalario.
Los ataques de misiles rusos contra la ciudad de Zaporizhzhia y la región de Dnipropetrovsk causaron al menos cinco muertes durante la noche, informaron las autoridades locales el miércoles.
“Anoche (miércoles), entre la 01:33 y la 01:48 (22:33 y 22:48 GMT del martes), Rusia disparó seis misiles contra la ciudad de Zaporizhzhia”, escribió en Telegram el gobernador regional Yuri Malashko.
Cuatro personas murieron en un edificio residencial impactado por un misil en Zaporizhzhia y una mujer murió en un ataque en las afueras de la ciudad de Dnipro, de acuerdo con el ministro ucraniano del Interior, Igor Klymenko.
“Los cuerpos de tres personas que se encontraban desaparecidas fueron recuperados de debajo de los escombros”, informó el gobernador de la región de Zaporizhzhia debajo de una imagen que muestra un edificio de viviendas con varios apartamentos destruidos.
Según Malashko, otros cinco civiles resultaron heridos y tuvieron que recibir tratamiento hospitalario.
Malashko también precisó que los proyectiles eran del modelo S-300 y que fueron disparados desde los territorios ocupados de la región.
La mayor central nuclear de Europa se encuentra en esta región, a unos cincuenta kilómetros de la ciudad de Zaporizhzhia. Está ocupada por las fuerzas rusas.
Un poco más al norte, la región de Dnipropetrovsk también fue bombardeada. Según las autoridades ucranianas se destruyeron viviendas en el pueblo de Obujiva.
El presidente de Ucrania, Volodimir Zelensky, condenó estos ataques y volvió a acusar al mandatario ruso Vladimir Putin de cometer actos de terrorismo contra la población civil ucraniana, así como la necesidad de llevar a sus responsables ante los organismos de justicia internacional.
“Haremos todo lo posible para hacer que el Estado terrorista pague por su responsabilidad. El terrorismo ruso debe perder”, remarcó Zelensky en un mensaje en Telegram.
Por su parte, el Ministerio de Defensa de Rusia afirmó este miércoles que había destruido un almacén de las Fuerzas Armadas de Ucrania en la región de Dnipropetrovsk, ataque en el que, según Kiev, murió una mujer. “En el aeródromo de Lozovoye, en la región de Dnipropetrovsk, fue destruido un almacén con armamento de la Fuerza Aérea de Ucrania”, señaló el comunicado castrense ruso.
Desde que comenzó la agresión militar de Rusia contra Ucrania, la ONU ha documentado las muertes de cerca de 10.000 civiles.
El diario The New York Times estimó hace pocos días que 70.000 ucranianos habrían muerto y que entre 100.000 y 200.000 habrían resultado heridos desde el inicio de la invasión, a finales de febrero de 2022, basándose en información de responsables estadounidenses que pidieron el anonimato. El balance ruso sería mucho mayor, con unos 120.000 muertos y entre 170.000 y 180.000 heridos, pero las reservas rusas son mucho más importantes, una ventaja a largo plazo.
