Reporteros sin Fronteras presentaron una denuncia ante la Corte Penal Internacional por las muertes de periodistas en el conflicto entre Israel y Hamás.
Por El Diario de NY
Reporteros Sin Fronteras (RSF) ha presentado una denuncia por crímenes de guerra ante la Corte Penal Internacional (CPI) en relación con los crímenes contra periodistas que perdieron la vida o resultaron heridos mientras informaban durante el conflicto entre Israel y Hamás.
Esta denuncia por crímenes de guerra marca la tercera presentación de este tipo por parte de RSF desde 2018. La denuncia proporciona detalles de nueve casos en los que periodistas fueron asesinados y otros dos resultaron heridos mientras realizaban su trabajo vital en Gaza e Israel, todos en el lapso de apenas unas semanas a partir del 7 de octubre.
“La magnitud, la gravedad y la naturaleza recurrente de los crímenes internacionales contra periodistas, especialmente en Gaza, exigen una investigación prioritaria por parte del fiscal de la CPI”, subrayó el secretario general de RSF, Christophe Deloire.
“Hemos estado pidiendo esto desde 2018. Los trágicos acontecimientos actuales demuestran la extrema urgencia de la necesidad de que la CPI actúe”, agregó.
Crímenes contra periodistas en Gaza e Israel
La denuncia por crímenes de guerra subraya las graves violaciones contra periodistas, incluidas la muerte de ocho periodistas palestinos en los bombardeos israelíes de Gaza y el asesinato de un periodista israelí mientras cubría un ataque de Hamás a su kibutz.
Sostiene que la muerte del periodista israelí equivalió al “asesinato intencional de una persona protegida por las Convenciones de Ginebra”, lo que constituye un crimen de guerra, según el Estatuto de Roma de la CPI.
La denuncia condena además los ataques a periodistas palestinos en Gaza como indiscriminados, alineándose con la definición de ataque indiscriminado del derecho internacional humanitario, categorizándolos así como crímenes de guerra.
Asesinato de la familia del periodista Wael Al-Dahdouh
La tragedia de este conflicto va más allá de las simples víctimas de periodistas. Un ataque aéreo israelí el 25 de octubre provocó la pérdida de la familia del jefe de la oficina de Al Jazeera en Gaza, Wael Al-Dahdouh.
Al Jazeera informó que “el ataque indiscriminado por parte de las fuerzas de ocupación israelíes resultó en la trágica pérdida de la esposa, el hijo y la hija de Dahdouh, mientras que el resto de su familia está enterrada bajo los escombros”.
La denuncia de la CPI también destaca la “destrucción deliberada total o parcial de las instalaciones de más de 50 medios de comunicación en Gaza”. RSF insta a la CPI a investigar a fondo todos estos casos de periodistas asesinados desde el 7 de octubre mientras cubrían el conflicto entre Israel y Hamás.
La declaración de RSF también hace un ferviente llamado a Israel para que cese los bombardeos en Gaza. Instan al gobierno israelí a reconocer las consecuencias de sus acciones y poner fin al ciclo de violencia.
RSF afirma: “El Estado de Israel tendrá que asumir la responsabilidad ante la historia por las muertes de periodistas en una escala desconocida en el siglo XXI. Hacemos un llamado a las autoridades israelíes para que pongan fin a los bombardeos, que constituyen crímenes de guerra”.
La denuncia por crímenes de guerra presentada por Reporteros sin Fronteras subraya el papel fundamental que desempeñan los periodistas a la hora de informar la verdad durante los conflictos y la necesidad de proteger su seguridad.
La respuesta de la CPI y las implicaciones de esta denuncia serán observadas de cerca mientras el mundo lidia con los trágicos acontecimientos del conflicto entre Israel y Hamás.
