Tegucigalpa – Las intensas lluvias continúan azotando gran parte del territorio hondureño, dejando a su paso una estela de devastación y dificultades. Según las últimas cifras oficiales proporcionadas por el titular del Fondo Hondureño de Inversión Social (FHIS), Octavio Pineda, ya se contabilizan un preocupante total de 32,924 compatriotas afectados por este desastre natural.
En un desglose más detallado de las repercusiones, se revela que hasta el momento se han identificado 65 tramos carreteros con problemas, lo que ha generado un importante desafío logístico para las autoridades encargadas de la infraestructura vial del país.
Además, se reporta que 164 viviendas han sido impactadas o destruidas en su totalidad, lo que ha dejado a numerosas familias hondureñas en una situación de desamparo y desolación.
Esta situación de emergencia ha generado un llamado de alerta en 32 municipios del país, de los cuales 17 se encuentran actualmente bajo Alerta Roja, indicando un nivel crítico de peligro.
La Comisión Permanente de Contingencias (Copeco) ha tomado medidas preventivas en respuesta a este impacto, extendiendo la Alerta Amarilla al resto del departamento de Olancho y dejando en Alerta Verde a otros 10 departamentos, incluyendo Copán, Lempira, Intibucá, Ocotepeque, La Paz, Comayagua, Francisco Morazán, El Paraíso, Choluteca y parte de Valle.
En medio de este escenario desafiante, el pronóstico meteorológico indica que las lluvias persistirán durante las próximas 48 horas, lo que podría agravar aún más la situación actual.
La saturación de los suelos por las fuertes precipitaciones ha provocado desbordamientos de ríos y quebradas, inundaciones y crecidas peligrosas en varios puntos del país, lo que ha generado una preocupación generalizada en las autoridades y la población en general.
Los esfuerzos de respuesta y rescate se han intensificado en un intento por proteger y ayudar a los afectados, mientras las autoridades trabajan incansablemente para mitigar el impacto de este desastre natural y restablecer la normalidad en las áreas afectadas.