La caravana migrante que partió la semana pasada de la frontera sur de México como la más numerosa del año se desintegró este viernes tras más de 10 días de recorrido en el estado de Chiapas.
Irineo Mujica Arzate, director de la organización Pueblos Sin Fronteras, explicó a EFE que el grupo se dispersó porque unos 500 migrantes, en particular familias, aceptaron los ofrecimientos del Instituto Nacional de Migración (INM) mientras que otros partieron por su cuenta a otros municipios.
“Este grupo de personas que quedó está más capacitado para poder caminar, pues estamos los que estamos y se va seguir adelante y especialmente caminaré hasta (el vecino estado de) Oaxaca”, comentó el activista, quien acompaña a los migrantes.
La mayoría de los extranjeros expresaron estar agotados, con llagas en los pies, enfermos, con dolores musculares y a paso lento, pero sin desistir de su intento de llegar a Estados Unidos, aunque sea por su cuenta.
“La verdad voy un poco débil, pero ahí vamos adelante, vamos a seguir hasta donde Dios quiera. Soy de Honduras, me dedicaba al comercio, pero todo ha bajado y hay muchas extorsiones“, expuso el migrante Marvin Zavala.
La caravana, que llegó a sumar 8.000 migrantes, partió la semana pasada como la más grande del año desde Tapachula, en la frontera sur de México, donde resistió y avanzó por más de 10 días, a diferencia de otras realizadas en meses anteriores que se desintegraban en breve.
Su avance se obstaculizó porque el INM les negó la entrega de Fórmulas Migratorias Múltiples (FMM) que les permitan transitar hacia el norte del país, pero los migrantes insisten en que el Gobierno mexicano se solidarice.
El hondureño Marcos Vivence caminó más de 100 kilómetros desde Tapachula hasta Mapastepec, pero muchos de sus compatriotas se quedaron sin agua, comida y medicinas.
“Hay varios compañeros que se han ido, han abandonado, nos hemos quedado sin dinero, sin medicinas, hay niños que están enfermos, si nos hubieran dado un permiso, no estuviéramos con esta situación”, lamentó.
El grupo que permanece en camino tiene la idea de descansar hasta el municipio de Mapastepec, y después, llegar a Pijijiapan.
La situación en la frontera sur refleja un flujo migratorio “sin precedentes” de la región, como advirtió la Organización Internacional de las Migraciones (OIM), con hasta 16.000 migrantes que llegan al día a las fronteras de México, de acuerdo con el presidente, Andrés Manuel López Obrador.