Tegucigalpa – La presidenta de la Asociación de Familiares de Privados de Libertad, Delma Ordóñez, expresó sus fuertes críticas hacia la viceministra de Seguridad, Julissa Villanueva, señalando que esta última pudo haber evitado la trágica matanza que tuvo lugar en la Penitenciaría Nacional Femenina de Adaptación Social (PNFAS), donde perdieron la vida 46 mujeres.
Según las declaraciones de Ordóñez, la viceministra Villanueva había sido alertada varios días antes del suceso acerca de la inquietante percepción de olor a gasolina entre las privadas de libertad, quienes además sospechaban de un posible plan de reyerta. «Ese día se necesitaba a la viceministra Villanueva y no nos dio la cara», reprochó la presidenta de la asociación.
Además, Ordóñez resaltó que la solicitud de separación de las privadas de libertad había sido presentada hace mucho tiempo, sin que las autoridades correspondientes tomaran medidas al respecto. En este contexto, la líder de la asociación exige que Villanueva asuma la responsabilidad correspondiente y admita que en ese momento no tomó las acciones necesarias.
Es importante señalar que Villanueva, en declaraciones recientes, responsabilizó a la Policía Nacional de Honduras por la masacre de 46 mujeres en la cárcel de Támara, ocurrida el 20 de junio de 2023.
La viceministra indicó que muchos de los cartuchos utilizados en el crimen pertenecían a la industria que suministra a la Policía Nacional y que algunas de las armas empleadas en la matanza también eran propiedad de dicho cuerpo de seguridad. Detalló que 15 balas encontradas en los cuerpos de las víctimas coinciden con las armas utilizadas por la policía.
No obstante, las declaraciones de Villanueva son percibidas por Delma Ordóñez como motivadas por intereses políticos. En contraparte, Ordóñez enfatizó que la viceministra tenía la capacidad de prevenir la tragedia de ese día y que sus afirmaciones responden únicamente a cuestiones políticas y a intereses personales.
La polémica en torno a las responsabilidades y acciones previas a la masacre de la PNFAS destaca la complejidad de la situación y la necesidad de esclarecer los hechos para garantizar la rendición de cuentas y la justicia.