Una de las claves es primero ubicar el módem en un lugar central en la casa.
Por Infobae
Hoy el internet en el hogar depende en gran medida del funcionamiento del WiFi, que en ocasiones genera problemas por el alcance de su señal, lo que implica menor velocidad o limitaciones de conectividad. Por eso es importante saber ubicar las antenas del router.
El módem es el epicentro de la red doméstica, emitiendo señales WiFi que nos mantienen conectados, especialmente desde los puntos más alejados. Sin embargo, su eficacia puede verse afectada por una variedad de factores, incluida la ubicación y orientación de sus antenas. Para maximizar su rendimiento, es crucial entender cómo posicionar estas antenas de manera óptima.
Antes de entrar en las recomendaciones sobre el posicionamiento de las antenas, es fundamental abordar la ubicación general del router dentro del hogar. Colocarlo en un lugar central, lejos de obstáculos como paredes gruesas o electrodomésticos, puede mejorar significativamente la cobertura de la señal.
El router debería estar elevado y sin obstrucciones alrededor, permitiendo que las ondas WiFi se propaguen libremente por toda la casa para que puedan llegar a las habitaciones más alejadas.
Una vez tengamos el router en el mejor lugar posible, será momento de centrarnos en la orientación de las antenas. Estos pequeños componentes desempeñan un papel crucial en la distribución de la señal WiFi, y su orientación puede influir en la fuerza y alcance de la conexión.
Así es la manera en la que se deben ubicar, dependiendo del diseño de cada módem:
- Antenas individuales:
Para routers con una sola antena, lo mejor será mantenerla en posición vertical. Esto permite que la señal se propague horizontalmente, cubriendo un área más amplia en el mismo nivel de altura. Sin embargo, si se necesita una mayor cobertura en pisos superiores, inclinar ligeramente la antena hacia arriba puede ser beneficioso.
- Dos antenas:
En el caso de routers con dos antenas, se puede lograr una distribución más uniforme de la señal al colocar una antena en posición vertical y la otra en horizontal. Esta configuración permite una cobertura más equilibrada tanto en el plano horizontal como en el vertical, abarcando múltiples niveles de la vivienda.
- Tres o más antenas:
Para dispositivos con tres o más antena, se recomienda experimentar con diferentes combinaciones para encontrar la configuración óptima. Inclinar ligeramente dos de las antenas para ampliar el alcance, mientras se mantiene la antena central en posición vertical para una distribución horizontal más eficiente.
Es importante tener en cuenta que el posicionamiento de las antenas no es algo exacto y puede variar según las características específicas de cada hogar. Por lo tanto, se recomienda probar diferentes configuraciones y ajustes para determinar qué funciona mejor en su entorno particular.
¿Cómo mejorar la señal WiFi?
Si a pesar de optimizar el posicionamiento de las antenas, todavía persisten los problemas de señal WiFi, existen otras medidas que puede tomar para mejorar su conexión.
- Cableado: una opción confiable es utilizar conexiones cableadas para transferir datos en la red local. Esto puede ser especialmente útil para distancias cortas dentro del hogar, donde el cableado Ethernet puede garantizar una conexión estable y de alta velocidad.
- Redes Mesh: estas ofrecen una solución innovadora para mejorar la cobertura WiFi en toda la casa. Al distribuir múltiples routers (o repetidores) que trabajan juntos como una sola red, las redes Mesh garantizan una conexión sólida y sin interrupciones, incluso en áreas difíciles de alcanzar.
- Ampliación de red eléctrica con un PLC: Los dispositivos Powerline Communication (PLC) aprovechan la red eléctrica existente en el hogar para transmitir datos. Esto significa que puede obtener una conexión Ethernet en cualquier lugar donde haya un enchufe eléctrico, eliminando la necesidad de extender cables por toda la casa.