Tegucigalpa – El exfiscal general, Edmundo Orellana, ha compartido su perspectiva sobre la posible instalación de la Comisión Internacional Contra la Corrupción e Impunidad (CICIH) en Honduras.
Según sus declaraciones, el proceso podría comenzar a tomar forma en el año 2025, siempre y cuando se lleven a cabo las reformas constitucionales necesarias durante este año.
Orellana enfatizó que si se logran las reformas constitucionales propuestas por el Gobierno, la CICIH podría empezar a establecerse el próximo año, siempre y cuando se ratifiquen dichas reformas.
Sin embargo, advirtió que si no se implementan las reformas pertinentes, la llegada de la CICIH podría plantear condiciones distintas, potencialmente comprometiendo su autonomía e independencia.
El exministro de Transparencia expresó confianza en la voluntad del Ejecutivo, destacando el compromiso de la presidente Xiomara de Zelaya con el tema anticorrupción.
No obstante, identificó al Congreso Nacional como un obstáculo significativo, ya que algunos sectores parecen buscar la impunidad debido a su implicación en casos de corrupción.
Orellana subrayó la importancia de implementar la Ley de Colaboración Eficaz para fortalecer el sistema judicial, aunque señaló que esto no debería ser una condición previa para la llegada de la CICIH.
Destacó que el Gobierno ha establecido como requisito que la CICIH tenga plenos poderes, lo que implica la necesidad de derogar y crear decretos legislativos.
En cuanto a las investigaciones, Orellana anticipó que una vez que la CICIH esté operativa en el país, se centrará en investigar al gobierno actual en primer lugar, ya que el anterior ya está siendo investigado por la Unidad Fiscal Especializada contra Redes de Corrupción (Uferco).
En resumen, Orellana ofrece una visión detallada del proceso potencial de instalación de la CICIH en Honduras, destacando los desafíos políticos y legislativos que deben superarse para hacer realidad esta iniciativa de lucha contra la corrupción.
