Tegucigalpa – Fabio Lobo, hijo del expresidente Porfirio Lobo Sosa y actualmente encarcelado en Estados Unidos por cargos relacionados con narcotráfico, ha lanzado acusaciones graves contra Carlos Zelaya, secretario del Congreso Nacional de Honduras, señalándolo como coordinador de aterrizajes de droga en una pista ilegal en Olancho, antes de 2010.
En una entrevista con el periódico El Faro de El Salvador, Lobo reveló detalles que vinculan a Zelaya con operaciones de narcotráfico en la región.
Según Lobo, personas como Nájera y Wilkin Montalván le informaron sobre la participación de Carlos Zelaya en el uso de la pista aérea El Aguacate en Catacamas, Olancho, y que «todos en Catacamas sabían para qué se usaba».
Lobo acusa a Zelaya de haberse beneficiado económicamente del tráfico de drogas, afirmando que «Carlos Zelaya no era nadie hasta que su hermano se convirtió en presidente».
Según él, los Zelaya acumularon riqueza utilizando esas pistas de aterrizaje para actividades ilícitas.
La entrevista de Lobo, realizada el 8 de agosto de 2022, ha sido difundida recientemente por El Faro, provocando una oleada de controversia.
Fabio Lobo no es el primero en implicar a Carlos Zelaya en actividades relacionadas con el narcotráfico. En 2017, «El Cachiro», Devis Rivera Maradiaga, mencionó que en 2010 había tenido discusiones con Zelaya sobre el uso de la pista de aterrizaje El Aguacate en Olancho para el transporte de drogas, aunque finalmente decidieron no llevar a cabo dichas operaciones debido al riesgo.
Las acusaciones de Lobo contra Zelaya resurgen en un contexto político tenso, ya que Zelaya es hermano del asesor presidencial, Manuel Zelaya Rosales, y cuñado de la presidenta de Honduras, Xiomara de Zelaya.
Estas revelaciones plantean serias interrogantes sobre la posible implicación de figuras políticas importantes en actividades criminales, generando un debate sobre la integridad y la transparencia en el gobierno hondureño.