Tegucigalpa – En un giro revelador durante el juicio que se lleva a cabo en Nueva York contra el expresidente hondureño Juan Orlando Hernández, la diputada Maribel Espinoza emitió duras críticas, enfatizando que los propios testigos han reconocido su conocimiento sobre las actividades del narcotráfico de su hermano, Juan Antonio Hernández.
La diputada del Partido Salvador de Honduras no escatimó palabras al defender la necesidad de justicia y reflexionar sobre el daño ocasionado a la nación por la violencia vinculada al narcotráfico.
Espinoza enfatizó que la figura de Juan Orlando Hernández debería representar un ejemplo de lo que Honduras no debería tolerar en su gobierno.
«Juan Orlando Hernández debe ser el ejemplo de lo que no debe seguir pasando en el país», sentenció la parlamentaria, subrayando la vergüenza y la ignominia que siente la nación por la implicación de políticos en el juicio.
Las acusaciones contra el expresidente incluyen cargos de conspiración para importar sustancias controladas a Estados Unidos, así como el uso y portación de armas de fuego en relación con actividades de narcotráfico, alegaciones que Hernández ha negado rotundamente, manteniéndose firme en su declaración de inocencia.
La diputada hizo un llamado directo al expresidente, sugiriendo que su primer acto al dirigirse al estrado debería ser pedir perdón a los hondureños por su presunta implicación en actividades ilícitas y permitir que el crimen organizado influenciara las decisiones del país.
Estas declaraciones profundizan la tensión en Honduras en medio de un juicio que ha puesto bajo el escrutinio internacional la presunta participación de altos funcionarios en actividades delictivas, lo que podría tener implicaciones significativas para el futuro político y legal del país centroamericano.