Tegucigalpa. – En el marco de los 273 años del hallazgo de la Virgen de Suyapa, el nuevo nuncio apostólico en Honduras, monseñor Gábor Pintér, hizo su debut en la eucaristía en la que pidió a la patrona de los hondureños interceder para detener la criminalidad que impera en el país.
El embajador del Vaticano agradeció al pueblo y al cardenal Óscar Andrés Rodríguez por permitirle realizar la misa principal en honor a la Virgen de Suyapa, patrona de Honduras.
En la homilía, Pintér, pronunció que solo bajo el manto de la madre santísima se podrá interceder ante Dios y el sufrimiento de María ante la muerte de Jesús, es el mismo que sufre cada familia hondureña cuando pierde un ser querido.
“En el curso de la historia, María ama a cada uno de sus hijos, prestando una atención particular a quienes como su hijo en la hora de la compasión están sumidos en el dolor los ama simplemente porque son sus hijos, según la voluntad de Cristo en la cruz”, refirió el representante papal.
Ante centenares de feligreses que se concentraron en la Basílica Menor, Pintér apuntó que el amor de María es fiel como el de toda madre, ella es la educadora del amor, es por ello que tantos enfermos vienen acá a este templo porque es su fuente de amor.
“Hoy se vuelve a repetir la historia cuando fue hallada la Virgen María, donde los niños lanzaban la imagen pensando que era una piedra, pero lastimosamente en ciertas tendencia donde se desearía lanzar a la virgen fuera de Honduras, fuera de los corazones de sus hijos, fuera de su cultura y de sus tradiciones, pero que sería de nosotros sin nuestra madre, a quien recurriríamos en momentos de aflicción y sin encontrar un refugio seguro frente al enemigo, estaríamos huérfanos, Honduras no está huérfana, tiene una madre que cuida por sus hijos, no permitan que nadie les arrebate a María de sus corazones”, argumentó.
Añadió que en la Virgen María los hondureños encontrarán consuelo porque es luz y camino de esperanza.
“Santa María de Suyapa tu que eres la madre de la paz haz que cesen las luchas y acaben para siempre los odios, que no se reiteren las muertes violentas, tu que eres madre enjuaga las lágrimas de los que lloran porque han perdido a un ser querido, de los migrantes que dejan su hogar, intercede por cada uno de ellos”, apuntó el representante del papa en Honduras.