Tegucigalpa – El Instituto de Conservación Forestal (ICF) de Honduras ha reportado una alarmante cifra de 233,722 hectáreas de bosque destruidas por incendios en lo que va del año.
La escalada de siniestros, que alcanza los 3,040 incendios registrados, ha golpeado con especial severidad al departamento de Olancho, donde se han perdido 68,692 hectáreas.
Francisco Morazán, el departamento que alberga la capital, Tegucigalpa, también ha sido severamente afectado con 47,361 hectáreas calcinadas.
La región de Gracias a Dios no se queda atrás, contabilizando 26,660 hectáreas dañadas por 103 incendios.
Este año, Honduras, que se extiende sobre una superficie de 112,492 kilómetros cuadrados, ha visto un incremento en las temperaturas que, junto a la quema de tierras para agricultura y actos de incendio provocados, se consideran las principales causas detrás de esta crisis.
Más de mil personas, incluyendo personal del ICF, miembros de las Fuerzas Armadas y otros grupos, han participado en los esfuerzos para combatir estos incendios.
Desde el ICF, se hace un urgente llamado a la población para ejercer mayor cautela en la gestión de quemas controladas y así evitar más siniestros que continúen devastando los bosques del país.
