Brasil. – En un movimiento sin precedentes, la Corte Suprema de Brasil ha ordenado la suspensión de la red social X (anteriormente conocida como Twitter), estableciendo multas de hasta 8.874 dólares diarios para los usuarios que accedan a la plataforma a través de VPNs.
Esta drástica medida llega tras la expiración del ultimátum que el magistrado Alexandre de Moraes dio a la empresa para registrar a sus representantes legales en el país.
La decisión judicial también exige a Google y Apple que eliminen X de sus tiendas digitales en un plazo de cinco días, limitando aún más el acceso de los brasileños a la red social.
El conflicto escala después de una serie de acusaciones por parte de Moraes contra Elon Musk, propietario de X, por supuestamente reactivar cuentas previamente suspendidas por orden judicial.
Musk, que había calificado a Moraes de «dictador malvado», enfrenta investigaciones por parte del Tribunal Supremo por interferir en asuntos de censura y desinformación.
La suspensión de X permanecerá vigente hasta que la empresa cumpla con todas las exigencias judiciales, incluido el pago de multas y la designación de un representante legal en Brasil.
Este caso destaca la tensión entre las políticas de libertad de expresión promovidas por Musk y las estrictas regulaciones brasileñas contra la desinformación, especialmente en un país que cuenta con uno de los mayores números de usuarios activos de X a nivel mundial, aproximadamente 20 millones.
La comunidad internacional y los defensores de la libertad de expresión observan atentamente los desarrollos de este enfrentamiento legal y sus implicaciones para el futuro de la libertad en internet.