Tegucigalpa – El reconocido economista hondureño Roberto Lagos ha expresado su preocupación por el reciente incremento de la Tasa de Política Monetaria (TPM) al 5.75%, medida que entrará en vigor a partir de mañana. Según Lagos, esta decisión podría tener efectos adversos en la economía nacional y afectar significativamente a la población.
Lagos sostiene que si el Gabinete Económico hubiera implementado ajustes en 2022, tal como varios economistas recomendaron en su momento, Honduras estaría en una posición más favorable. «Si el Gabinete Económico no hubiese sido tan terco y hubiese realizado los ajustes en el año 2022, en este momento estaríamos bajando las tasas de interés como el resto del mundo», afirmó el economista.
Cuestionamientos al Gabinete Económico
En una serie de publicaciones en su cuenta de la red social X, Lagos criticó la falta de previsión y planificación del Gobierno en materia económica. «Una medida de esta magnitud sin tener una estimación muy acertada del impacto puede generar efectos opuestos a los deseados», señaló.
Además, puso en duda la eficacia de las recientes negociaciones en Washington D.C., sugiriendo que podrían haber sido más simbólicas que sustanciales.
«¿Por qué no usaron los instrumentos de política monetaria de forma más ordenada? ¿Por qué no diseñaron políticas para proteger a la ciudadanía que más resentirá los ajustes?», cuestionó Lagos, refiriéndose a lo que considera una politización de la discusión económica y un cambio abrupto de medidas heterodoxas a neoliberales.
Impacto en la economía y en la población
El economista destacó varios indicadores que reflejan una situación económica preocupante. Entre ellos, la caída de las reservas internacionales en 2,000 millones de dólares y una desaceleración pronunciada del crédito a las empresas, lo que implica menor inversión y generación de empleo.
«El incremento de las tasas de interés afecta directamente a los sectores productivos y a los consumidores. Creo que el hondureño de a pie no me dejará mentir si en el último mes han incrementado sus tasas de interés en operaciones nuevas y existentes», expresó.
Lagos también mencionó que, según datos de julio de este año, el crecimiento de los impuestos directos en términos reales es de -1.41%. Además, señaló un déficit comercial de 5,434 millones de dólares, evidenciando un sesgo importador en la economía nacional.
Críticas al sistema financiero
Otro de los puntos abordados por Lagos fue el sistema de subasta de divisas, al que calificó de obsoleto. Según él, este sistema ha generado especulación, mercados paralelos y dificultades en el acceso a dólares.
Asimismo, hizo hincapié en el fuerte subempleo y la baja creación de empleos, sumado a la falta de políticas para evitar la pérdida de puestos de trabajo debido al cierre de operaciones de diversas compañías en el país.
Preocupación por el futuro económico
«Por la falta de consistencia y timing del equipo de gobierno actual, estaremos observando una severa estocada a la economía hondureña con ese incremento de 170 puntos básicos a la TPM», advirtió Lagos.
Aunque reconoce que algunos ajustes eran necesarios para resolver problemas existentes, considera que la magnitud de este incremento es excesiva y podría tener consecuencias negativas inesperadas.
El economista concluyó haciendo un llamado a la reflexión y a la implementación de políticas económicas más coherentes y planificadas. Sus declaraciones invitan al debate sobre las medidas adoptadas por el Gobierno y su impacto en la economía y el bienestar de los hondureños.
