Tegucigalpa – La Fundación del Niño Quemado (Fundaniquem) enfrenta una situación sin precedentes al operar al 110% de su capacidad instalada, según reveló su presidente Omar Mejía en un reciente informe sobre la situación actual del centro asistencial.
Las estadísticas presentadas muestran un incremento significativo en la atención de pacientes durante 2024, alcanzando aproximadamente 480 casos, lo que representa un aumento del 25% en comparación con el mismo período del año anterior.
«Estamos recibiendo más de un paciente por día», señaló Mejía, destacando que, a pesar de la alta demanda, no se han registrado fallecimientos gracias al apoyo gubernamental en el suministro de insumos médicos.
El análisis de las causas revela un patrón preocupante: más del 70% de los incidentes ocurren en el entorno doméstico, principalmente por contacto con agua o alimentos calientes preparados por adultos, seguido por accidentes relacionados con la electricidad.
La institución ha intensificado sus esfuerzos en la prevención, especialmente ante la proximidad de las celebraciones navideñas y de fin de año. Aunque se ha observado una reducción en los casos relacionados con quemaduras por pólvora en comparación con años anteriores, las autoridades mantienen la alerta.
«La prevención comienza en casa», enfatizó Mejía, quien hizo un llamado especial a los padres de familia para mantener una supervisión constante de los menores y, en caso de utilizar pirotecnia durante las festividades, asegurar que sea manipulada exclusivamente por adultos.
La situación actual de Fundaniquem refleja un desafío creciente en la atención médica especializada para niños con quemaduras, evidenciando la necesidad de fortalecer las medidas preventivas y la concientización sobre los riesgos en el hogar.
