Tegucigalpa – En un momento crucial para la sociedad hondureña, la Iglesia Católica ha anunciado la celebración del Jubileo 2025, un evento que trasciende lo religioso para convertirse en un llamado a la renovación social.
El arzobispo de Tegucigalpa, Monseñor Vicente Nácher Tatay, ha destacado el carácter inclusivo de esta celebración, extendiéndola «a todas las personas de buena voluntad» más allá de la feligresía católica.
La inauguración del Año Santo se realizará simultáneamente en dos de los templos más emblemáticos de Tegucigalpa: la Catedral Metropolitana de San Miguel Arcángel, con actividades iniciando a las 7:30 AM, y la Basílica Nuestra Señora Santa María de Suyapa, donde se realizará una peregrinación especial a partir de las 2:30 PM.
El mensaje de la Conferencia Episcopal adquiere particular relevancia en el contexto actual de polarización social.
«Es imposible el cambio de la sociedad si no empezamos a cambiar cada uno de nosotros», señalaron los obispos, mientras el padre Juan Ángel López advirtió sobre los peligros de la diatriba y la falta de respeto que caracterizan el discurso público actual.
La celebración incorpora aspectos prácticos para facilitar la participación masiva. Cada diócesis contará con sus propias iglesias de peregrinación, y los Decanatos podrán solicitar días jubilares específicos.
Este sistema descentralizado busca hacer más accesible la experiencia del Jubileo a todas las comunidades del país.
El evento, que se celebra cada 25 años, representa para la Iglesia un período dedicado «a consolidar la fe y la solidaridad», ofreciendo indulgencias a quienes demuestren un compromiso genuino con los valores cristianos y las obras de caridad.
En el contexto hondureño actual, esta celebración se presenta como una oportunidad de reflexión y reconciliación nacional.