Tegucigalpa – La violencia contra las mujeres en Honduras ha alcanzado niveles críticos en el inicio de 2025, según reveló Ana Cruz, directora de la Asociación Calidad de Vida.
Las cifras son contundentes: mientras que en los primeros 10 días de 2024 se registraron 11 feminicidios, en el mismo período de 2025 la cifra se ha elevado a 16 casos, representando un incremento del 33%.
Lo más preocupante de esta crisis es el alto índice de impunidad que rodea estos crímenes. Según las estadísticas presentadas por la organización, el 95% de los casos de feminicidio permanecen sin resolver, una situación que, según Cruz, refleja la persistencia de una cultura machista que tiende a proteger a los agresores en lugar de hacer justicia.
«Esta realidad es un claro indicador de la vulnerabilidad que enfrentan las mujeres en nuestro país», señaló Cruz, quien enfatizó la urgente necesidad de abordar no solo los casos recientes, sino también investigar los crímenes de años anteriores que continúan sin resolverse.
La situación ha generado un llamado urgente a las autoridades para que fortalezcan los mecanismos de investigación y justicia, buscando no solo esclarecer los casos actuales sino también brindar respuestas a las familias que aún esperan justicia por feminicidios ocurridos en años anteriores.
Este incremento en la violencia contra las mujeres plantea serios cuestionamientos sobre la efectividad de las políticas de protección y prevención existentes en Honduras.