Tegucigalpa – La inseguridad jurídica en materia de propiedad territorial continúa siendo un obstáculo mayor para la inversión en Honduras, según alertó Alberto Bográn, directivo del Consejo Hondureño de la Empresa Privada (COHEP). El problema se ha agravado significativamente desde el inicio del actual gobierno, con un incremento del 50% en las tierras invadidas.
Bográn expresó su preocupación por la escalada de tensiones en zonas afectadas por invasiones, que ahora incluyen fincas de palma africana y propiedades ganaderas.
«Iniciamos este gobierno con 40 mil hectáreas de tierra invadida y en la actualidad la cifra se ubica sobre las 60 mil hectáreas», señaló el empresario, haciendo un llamado urgente para prevenir posibles enfrentamientos violentos.
La Comisión de Seguridad Agraria, establecida en junio de 2023 para abordar esta problemática, ha mostrado resultados «mínimos» según el directivo, quien exige un informe detallado de los logros alcanzados hasta la fecha. Esta situación genera preocupación adicional dado el incremento de conflictos en las zonas afectadas.
El representante empresarial enfatizó que, si bien reconoce el derecho de los hondureños al acceso a la tierra, este debe ejercerse dentro del marco legal y con respeto a la propiedad privada.
«Esto ahuyenta fuertemente la inversión y el sector productivo», advirtió Bográn, subrayando la necesidad de un plan concreto para abordar la crisis.
La situación actual representa un desafío significativo para el desarrollo económico del país, amenazando tanto la seguridad jurídica como la paz social en las zonas rurales de Honduras.