Tegucigalpa – En un desarrollo significativo del caso que ha conmocionado a Olancho, las autoridades han detenido a dos jóvenes de 20 y 21 años por su presunta participación en el secuestro y asesinato de la maestra Aleyda Cabrera Santos.
Durante su traslado a la Fiscalía del Ministerio Público, uno de los detenidos, quien resultó ser exalumno de la víctima, realizó una sorprendente confesión a los medios de comunicación.
El joven, visiblemente afectado, reveló que actuó bajo coerción, alegando que su familia estaba siendo amenazada por terceros, señalados como los presuntos autores intelectuales del crimen.
Esta declaración sugiere una trama más compleja detrás del asesinato de la educadora, quien además era prima del actual alcalde de Gualaco, Edwin Antonio Díaz Cabrera, del partido Libertad y Refundación (Libre).
Las investigaciones preliminares indican que la maestra fue interceptada el pasado 14 de enero cerca del centro del municipio. Su cuerpo fue hallado con múltiples impactos de bala, lo que evidencia la brutalidad del crimen. Los sospechosos enfrentan cargos por secuestro agravado y asesinato.
«Me arrepiento de lo que hice, pero mi familia corría riesgo», manifestó uno de los detenidos, quien también pidió perdón a la familia de la víctima, reconociendo el vínculo previo que tenía con la maestra y su entorno.
Este nuevo desarrollo en el caso plantea interrogantes sobre las verdaderas motivaciones detrás del crimen y subraya la necesidad de profundizar en la investigación para identificar y procesar a todos los responsables, especialmente a quienes orquestaron el asesinato sin «mancharse las manos».