Tegucigalpa – La comunidad de Río Lindo, en San Francisco de Yojoa, Cortés, se vio conmocionada este martes tras el hallazgo del cuerpo sin vida de Luis Galdámez, un hondureño de 63 años que había sido deportado recientemente de Texas, Estados Unidos, como parte de los nuevos vuelos de deportación implementados este año.
Los familiares de Galdámez, residentes de la colonia La Paz en la comunidad de Río Lindo, reportaron su desaparición poco después de su regreso al país. Las autoridades localizaron su cuerpo flotando en las aguas del río Lindo, en circunstancias que están siendo investigadas.
Las primeras hipótesis de los investigadores apuntan a un posible accidente. Se presume que Galdámez podría haber resbalado desde un puente de hamaca cercano a su residencia, lo que habría resultado en su fallecimiento por sumersión. No obstante, las autoridades continúan con las investigaciones para determinar las causas exactas del deceso.
Este trágico incidente ocurre en el contexto de la reciente intensificación de deportaciones desde Estados Unidos. El pasado 31 de enero, Honduras recibió los primeros vuelos militares con migrantes deportados, transportando un total de 126 personas en dos aeronaves procedentes de Texas.
Ante esta situación, el gobierno hondureño ha puesto en marcha el programa «Hermano, hermana, vuelve a casa», una iniciativa diseñada para facilitar la reinserción de los compatriotas deportados. Sin embargo, este caso pone de manifiesto los desafíos y riesgos que enfrentan los retornados en su proceso de readaptación al país.
Las autoridades han señalado que realizarán una investigación exhaustiva para esclarecer las circunstancias exactas que rodearon el fallecimiento de Galdámez, mientras la comunidad local y familiares esperan respuestas sobre este lamentable suceso que ha conmocionado a la región norte del país.