Tegucigalpa – La violencia política en Honduras muestra una preocupante tendencia al alza a medida que se aproximan las elecciones, según datos revelados este martes por la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH).
El Instituto Universitario en Democracia, Paz y Seguridad (IUDPAS) de la Facultad de Ciencias Sociales ha documentado un total de 24 casos de violencia vinculada al proceso electoral desde que se convocó a elecciones el 8 de septiembre de 2024.
El informe detalla que entre las víctimas figuran 15 hombres y 9 mujeres, pertenecientes a los tres principales partidos políticos del país: 9 militantes del partido Libre, 9 del Liberal y 6 del Nacional. El balance más trágico lo conforman 6 homicidios, 4 de ellos dirigidos contra precandidatos a alcaldías municipales.
Tipología de la violencia política
El estudio identifica diversos tipos de agresiones en el contexto electoral:
- 6 homicidios (25% de los casos)
- 4 atentados (16.7%)
- 6 agresiones simbólicas (25%)
- 2 agresiones físicas (8.3%)
- 2 amenazas a la vida (8.3%)
- 3 intentos de coacción/intimidación (12.5%)
- 1 caso de difamación (4.2%)
La dispersión geográfica de estos incidentes abarca nueve departamentos: Colón, Valle, Comayagua, Francisco Morazán, Cortés, Copán, Lempira, Atlántida y Yoro. Según el informe, el primer caso de violencia homicida registrado fue el del ambientalista, regidor y aspirante a la alcaldía de Tocoa, Colón, mientras que el más reciente corresponde al asesinato de un precandidato a la alcaldía de Morazán, en el departamento de Yoro.
Una observación sistemática
El Área de Democracia del IUDPAS presentó estos hallazgos como parte del proyecto de Observación de la Conflictividad y Violencia Política impulsado por la Facultad de Ciencias Sociales. Esta iniciativa busca visibilizar la problemática y plantear recomendaciones para abordarla.
La UNAH destaca que, en su rol académico e investigador, ha observado la violencia política en cinco de los doce procesos electorales de la era democrática hondureña. Estos análisis se han caracterizado por ser sistemáticos, independientes y con perspectiva de género, lo que ha permitido identificar las debilidades estructurales del sistema electoral del país.
«Los resultados de estas observaciones han contribuido a emitir recomendaciones para la construcción y fortalecimiento de los valores democráticos», señala el comunicado universitario, que enfatiza la importancia de fomentar «un rol ciudadano propositivo y crítico enfocado en la inclusión, respeto, transparencia y eficiencia desde la participación ciudadana informada».
Expertos en resolución de conflictos consultados coinciden en que esta escalada de violencia podría afectar significativamente la participación ciudadana en las próximas elecciones, creando un clima de temor que amenaza los fundamentos mismos del proceso democrático hondureño.
