Aunque lejanas y en ocasiones, poco conocidas, las tecnologías empleadas en el espacio reflejan el desarrollo humano en la Tierra y generan un gran interés. Durante el Foro de Davos 2025, se presentaron algunos de los proyectos más relevantes del sector para este año y los próximos.
Por Infobae
El avance en la tecnología espacial está impulsando transformaciones en áreas como el monitoreo satelital, la ciencia de materiales y las soluciones energéticas. Durante la Reunión Anual 2025 del Foro Económico Mundial en Davos, especialistas debatieron sobre las innovaciones emergentes que podrían redefinir la exploración espacial y la producción de energía en el futuro.
Al respecto, Andrius Kubilius, comisionado europeo de Defensa y Espacio, expresó que “el siglo XXI será realmente el siglo del espacio”. A continuación, se presentan doce tecnologías clave que serán protagonistas en 2025.
Sistemas avanzados de observación de la Tierra
Los sistemas de observación de la Tierra utilizan imágenes hiperespectrales y algoritmos de aprendizaje automático para el análisis en tiempo real de datos ambientales. En este sentido, el diagnóstico planetario depende totalmente de estas tecnologías. Dava Newman, directora del MIT Media Lab, asegura que los humanos “no podemos vivir un día sin esto”.
Estos sistemas permiten monitorear con precisión las emisiones de gases de efecto invernadero, la deforestación y la calidad del aire, además de ser herramientas clave en la predicción y gestión de desastres naturales, como incendios forestales y huracanes.
Actualmente, la Agencia de Exploración Aeroespacial de Japón (JAXA) ha desarrollado programas como GOSAT, que han acumulado 15 años de datos sobre la variación del dióxido de carbono. Según el Foro Económico Mundial, con el uso de estas tecnologías podrían reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en hasta dos gigatoneladas anuales.
BioSuit: La nueva generación de movilidad espacial
El BioSuit, desarrollado en el MIT Media Lab, emplea materiales elásticos calibrados con precisión para proporcionar contrapresión mecánica al cuerpo del astronauta. Este traje, con un peso un 60 % menor que los modelos actuales, mejora la movilidad y cuenta con sensores biométricos para monitorear constantes vitales. A diferencia de los trajes espaciales tradicionales, el BioSuit permite a los astronautas realizar movimientos más naturales y flexibles, lo que resulta crucial en misiones de larga duración.
Además, su estructura modular facilita reparaciones y ajustes sin necesidad de regresar a la Tierra. Su despliegue está previsto para misiones a Marte en la década de 2030.
Energía solar basada en el espacio (SBSP)
JAXA y Caltech han desarrollado prototipos de SBSP capaces de transmitir energía solar desde el espacio a la Tierra mediante haces de microondas. Este proyecto, que logró con éxito la transmisión inalámbrica de energía en el espacio a principios de 2024, podría generar hasta 2 gigavatios de energía, suficiente para abastecer a aproximadamente 1,5 millones de hogares con una sola instalación.
Esta tecnología podría proporcionar energía continua sin depender de factores climáticos, lo que la convierte en una alternativa viable para reducir la dependencia de combustibles fósiles. Se espera que las primeras instalaciones piloto entren en funcionamiento en los próximos años, con un despliegue comercial proyectado para la década de 2040.
Mega-constelaciones de satélites avanzados
Empresas como SpaceX, Amazon y OneWeb están lanzando redes de satélites con enlaces láser inter-satélites y cifrado cuántico. Estas constelaciones buscan proporcionar conectividad global a internet con baja latencia y alta velocidad.
Zack Bogue, cofundador de DCVC, destacó que el costo de lanzamiento ha disminuido diez veces en la última década y se espera una reducción similar en el futuro, lo que permitirá ampliar la infraestructura de telecomunicaciones en regiones remotas y mejorar la seguridad en la transmisión de datos.
Eliminación activa de desechos espaciales
Con más de 35.000 piezas de desechos espaciales en órbita, se están desarrollando tecnologías para su eliminación, incluyendo brazos robóticos, sistemas de visión por inteligencia artificial y velas de arrastre para la desorbitación de escombros.
Empresas y agencias espaciales están explorando métodos innovadores como el uso de láseres para desviar o destruir pequeños fragmentos y el empleo de satélites recolectores que capturan desechos con redes o dispositivos magnéticos. Se prevé que estas soluciones entren en operación a gran escala en la década de 2030.
Monitoreo de la salud e investigación biomédica
La investigación en microgravedad permite el desarrollo de medicamentos más eficaces. Experimentos a bordo de la Estación Espacial Internacional (ISS) han mostrado mejoras en la cristalización de proteínas, facilitando el diseño de tratamientos para enfermedades como el Alzheimer y ciertos tipos de cáncer.
Además, se están estudiando los efectos a largo plazo de la exposición al espacio en el cuerpo humano, con el objetivo de desarrollar contramedidas para mitigar la pérdida ósea y muscular en misiones prolongadas.
Propulsión espacial de próxima generación
Se están desarrollando sistemas de propulsión térmica nuclear y propulsión iónica avanzada para reducir los tiempos de tránsito a Marte en un 40%.
Empresas como Impulse Space trabajan en soluciones para trasladar satélites entre diferentes órbitas de manera más eficiente. Estos avances también incluyen motores de plasma y sistemas de propulsión basados en campos magnéticos, que podrían permitir misiones más largas y exploraciones más profundas en el sistema solar.
Minería de asteroides
Las misiones de prospección espacial están explorando el potencial de extracción de recursos en asteroides mediante tecnologías como la espectroscopía de neutrones y el radar de penetración profunda.
Estos recursos incluyen metales raros, agua y compuestos volátiles que podrían utilizarse como combustible para futuras misiones espaciales. Se espera que las primeras operaciones piloto de minería espacial comiencen en la década de 2030.
Infraestructura de servicio orbital
Los servicios de mantenimiento en órbita incluyen robótica avanzada y sistemas de impresión 3D para la reparación y actualización de satélites. Estas innovaciones permitirán extender la vida útil de los satélites, reducir costos operativos y facilitar la construcción de estructuras en el espacio sin necesidad de lanzamientos adicionales desde la Tierra.
Generación de gravedad artificial
Investigaciones en gravedad variable buscan mitigar los efectos de la microgravedad en la salud humana. Se están explorando soluciones basadas en biotecnología avanzada y exposición selectiva a gravedad artificial para vuelos espaciales de larga duración. La aplicación de estas tecnologías podría permitir la creación de estaciones espaciales con ambientes de gravedad parcial, reduciendo los efectos negativos en la fisiología humana.
