Tegucigalpa – La noche del pasado domingo 16 de marzo de 2025 se convirtió en escenario de una tragedia en Roatán cuando tres jóvenes perdieron la vida tras sufrir un violento impacto mientras participaban en carreras clandestinas, comúnmente conocidas como «piques».
Las víctimas mortales fueron identificadas como José Antonio Sánchez, Juan Antonio Varela y Misael Salomón García. Además, un cuarto participante, un menor de 16 años, resultó gravemente herido en el percance. Según reportes de testigos en la zona, vecinos acudieron rápidamente para auxiliar a los jóvenes tras la colisión, pero tres de ellos ya habían fallecido en el lugar del siniestro.
Este fatal accidente refuerza las advertencias de la Dirección Nacional de Vialidad y Transporte (DNVT), que ha confirmado que los accidentes de tránsito representan actualmente la segunda causa de muertes en Honduras. La institución ha señalado que la alta velocidad se ha convertido en el principal factor de fallecimientos en las carreteras del país.
El incidente de Roatán ocurre apenas tres días después de otra colisión múltiple registrada el jueves 13 de marzo en Tegucigalpa, también relacionada con carreras clandestinas, donde 10 personas resultaron involucradas y cuatro de ellas sufrieron heridas de gravedad.
Las autoridades recuerdan que la Ley de Tránsito de Honduras, en su artículo 98, numeral 6, prohíbe expresamente el uso de vías públicas para competencias de vehículos. Sin embargo, estas prácticas ilegales continúan siendo frecuentes en diversas zonas del territorio nacional, resultando en un preocupante número de víctimas fatales y heridos.
La DNVT ha intensificado los llamados a la ciudadanía para evitar participar en este tipo de actividades de alto riesgo, al tiempo que refuerza los operativos de vigilancia en puntos identificados como frecuentes para la realización de estas competencias clandestinas.
