Barcelona – Un gol de Lenglet, una maravilla de Leo Messi y Luis Suárez de penalti encarrilan el pase a cuartos para el equipo azulgrana, que en el último suspiro de la primera parte vio como Insigne recortaba distancias desde los 11 metros.
El Nápoles dominó los primeros compases del encuentro, pero en el minuto 10 Lenglet inauguró el marcador con un excelente cabezazo a la salida de un córner lanzado por Rakitic y este golpe de efecto cambió la dinámica del partido, que empezó a ser controlado por el equipo local.
En el minuto 23 Messi se inventó una nueva obra de arte para su colección y después de irse de tres defensores del Nápoles mandó con la pierna izquierda una parábola hacia el lado derecho de la portería de Ospina, quien nada pudo hacer ante la inspiración del argentino.
La que parecía la sentencia de la eliminatoria llegó en el 45+1 con un penalti transformado por Luis Suárez y cometido por Koulibaly sobre Messi. Pero en el 45+5 otro penalti, este transformado por Insigne y cometido por Rakitic, dejó abierto el segundo tiempo. EFE