Texas. – El niño migrante Cristian Pavón Pineda, de 11 años falleció, el pasado martes en Conroe, Texas, tras pasar dos noches durmiendo en una casa móvil sin luz eléctrica ni calefacción. En esa región de Estados Unidos, se experimenta una ola de frío con temperaturas récord.
El infante era originario de Morazán, Yoro, Honduras de donde había migrado no hace mucho tiempo.
La madre del pequeño, María Pineda, relató que el pasado lunes el menor estaba bien de salud y estuvieron jugando con la nieve por la noche.
“Temprano estuvimos afuera, le tomé fotos, todo bien. Estuvimos jugando por la noche, nunca me imaginé que esto iba a pasar”, lamentó Pineda.
La progenitora también mostró fotografías del ahora fallecido jugando a la nieve bien abrigado.
La noche del pasado lunes, Cristian se fue a dormir con un clima aproximado a 12 grados Fahrenheit, con varias cobijas, y se acomodó con otro menor de tres años y fue hasta la mañana del martes anterior que ya el niño no tenía signos vitales.
“Él estaba bien. Jamás me imaginé esto. Creemos que por el frío porque él estaba todo bien. Él cenó, jugó y se acostó. Me dijo, ya me voy a dormir”, añadió.
La madre del ahora occiso, espera la respuesta de Medicina Forense, para saber cuál fue la causa concreta de su fallecimiento.
“Mi deseo era seguir con él, ya estaba crecido, Teníamos muchos planes con él”, refirió.
La hondureña pide a las autoridades que le apoyen para repatriar el cuerpo de su hijo para Honduras para que pueda descansar con sus abuelos.