Tegucigalpa. – El Banco Central de Honduras (BCH), presentó este viernes el nuevo Programa Monetario que proyecta para finales de 2021 un crecimiento económico de entre 3.2 y 5.2 por ciento.
El 2020 Honduras registró una de las caídas económicas más grandes que se han registrado, ya que el BCH oficializó que la misma fue del -9%, debido a la pandemia del Covid-19 y las tormentas tropicales Eta y Iota que se registraron en noviembre del año pasado, pero cuyas consecuencias se mantienen.
El BCH estima que lo anterior estará sustentado en la recuperación que comenzó el año pasado, a la mejor confianza de los agentes económicos debido a mejores condiciones de la salud por la pandemia tanto a nivel nacional e internacional, a ejecución de obras, programas de reconstrucción de la infraestructura dañada por las tormentas Eta y Iota.
El presidente del BCH, Wilfredo Cerrato, aclaró que a pesar de las mejoras de las tasas de crecimiento del PIB, la producción previa a la pandemia se alcance hasta el 2023.
Cerrato detalló que los niveles de inflación se mantendrán en el rango del cuatro por ciento, con un margen de alza o baja del uno por ciento tanto para el presente año como para el 2022.
Indicó que este año se espera menor presión por la demanda agregada, lo que no provocará presiones inflacionarias. Pero el 2022 si espera el BCH presiones debido a una mayor demanda agregada, en línea con la recuperación económica.
Los técnicos del BCH proyectan que este 2021 las exportaciones tendrán un repunte del 10.1 por ciento y para el 2022 estima que será de un 4.8 por ciento. En 2020 las exportaciones hondureñas cayeron en 12.6 por ciento.
Respecto a las importaciones, el Programa Monetario estima un alza del 19 por ciento este año y para el próximo será del 4.5 por ciento. El año pasado se registró una baja del 15.7 por ciento en las importaciones, debido a la paralización de la actividad económica.
El BCH considera que las reservas internaciones, medidas por meses de importaciones de bienes y servicios, caerán de 8.8 meses el 2020 a 7.5 meses para el actual año e igual número para 2022.
El organismo señala que continuará utilizando la Tasa de Política Monetaria (TPM) como su principal instrumento para mostrar su política monetaria al mercado y gestionar la liquidez del sistema financiero.
También destaca el BCH que continuará en la modernización del marco operacional de la política monetaria, así como la flexibilización cambiaria, a fin de mantener una inflación baja y estable.
