Tegucigalpa. – El arzobispo de Tegucigalpa, cardenal Oscar Rodríguez, manifestó durante la homilía dominical oficiada en la Basílica Menor Nuestra Señora de Suyapa que “venceremos la pandemia”, pero no lo haremos solos, sino que con el poder de Jesús.
“Con el aislamiento por el coronavirus cómo sufrimos y cómo sufrieron tantos hondureños porque no podían recibir la Santa Comunión. Poco a poco vamos a ir venciendo este mal, pero no lo haremos solos, sino con la presencia de aquel, de Jesús, que se quedó como nuestro alimento”, manifestó.
El religioso se preguntó, que “¿cómo es posible que sigamos celebrando la Santa Eucaristía siendo indiferentes ante la injusticia, ante la desigualdad en nuestro mundo de hoy?”.
“¿Cómo podemos celebrar la eucaristía y no compartir nuestra vida, nuestro amor y nuestra entrega a pesar de todo?”, apuntó.
“Por eso hoy digámosle a Cristo: Señor quiero recibir hoy tu gesto de amor y dejarme asimilar por ti. Tú que has venido para que todos tengan vida ayúdame a ser portador de vida nueva”, clamó el prelado.
“Ayúdame a ser portador de tu gracia, portador de tu amor para que nuestra Honduras cambie, para que nuestra Honduras se transforme en una ofrenda permanente agradable a Dios padre”, afirmó.
Rodríguez recordó que, “en la cena de despedida, las palabras de Jesús toman una particular importancia: Ya no beberé más del fruto de la vid, hasta el día que lo beba de nuevo en el reino de Dios”.
“Es decir, eso toma un significado histórico, Jesús es consciente que está al final de su vida en este mundo, su muerte aun siendo triste y dolorosa está llena de esperanza”, reflexionó el prelado.
“Para el Señor Jesús hay un más allá donde se consuma el reino de Dios, donde está el vino nuevo de la vida nueva. Lo que Jesús nos está prometiendo es la pascua definitiva”, subrayó.
“Es decir, el mundo nuevo vendrá a pesar de su aparente derrota, por eso la fiesta de hoy es una fiesta de esperanza a pesar del mal de nuestro mundo”, sentenció el religioso.