Tegucigalpa. – La creación de una nueva administración tributaria marcó una página en la historia de la recaudación de tributos en Honduras, donde medidas como la reducción de tasas impositivas y la ampliación de la base de contribuyentes han permitido el impulso de obras y programas sociales y otros beneficios a favor del pueblo hondureño.
“El avance que hemos tenido en el tema de la administración tributaria, en la creación de una nueva administración tributaria, es algo que debe generarle orgullo a la población hondureña”, estimó la directora ejecutiva del Servicio de Administración de Rentas (SAR), Miriam Guzmán.
La funcionaria destacó la visión y la decisión que tuvo el presidente de la República, Juan Orlando Hernández, de tomar al más alto nivel la decisión de cerrar una administración tributaria que, señaló, “todos sabíamos que no reunía las condiciones que requería el país para una correcta gestión de los recursos y fundar una nueva que es hoy el Servicio de Administración de Rentas”.
La presión tributaria como porcentaje del Producto Interno Bruto (PIB) de Honduras ha venido en reducción, al nivel que sectores que contribuyen a la economía nacional han sido exonerados de impuestos.
Para el caso, las micros, pequeñas y medianas empresas (Mipymes), que fueron amparadas bajo la Ley de Apoyo a la Micro y Pequeña Empresa, la cual exonera al sector y aplica al pago Impuesto Sobre la Renta (ISR), el Impuesto al Activo Neto y Aportación Solidaria Temporal, anticipos del 1% y 12.5% en concepto del Impuesto Sobre la Renta.
Con la ampliación de la base tributaria, Honduras pasó de tener en 2013 un total de un millón 232 mil 126 personas que pagan impuestos a dos millones 841 mil 480 contribuyentes, hasta septiembre de 2021.
Esto es doblar la cantidad de contribuyentes, tal como lo señaló el presidente del Banco Central de Honduras (BCH), Wilfredo Cerrato, al presentar los logros económicos del Gobierno en el periodo 2014-2021.
Cerrato, quien es el coordinador del Gabinete Económico, destacó que este factor permitió la disponibilidad de recursos para la creación de programas y proyectos sociales a favor del pueblo.
Para Guzmán, la ampliación de la base de contribuyentes también genera un ambiente de igualdad de condiciones, porque “debemos reconocer que jamás va a competir en igualdad de condiciones el evasor con el que paga correctamente sus impuestos”.
“La justicia tributaria es la base para la construcción de una sociedad equitativa porque nos permite la redistribución de la riqueza”, afirmó Guzmán.
Durante la presentación de logros económicos, el presidente Hernández recordó que antes de ejecutar las acciones en el tema de recaudación de tributos “había una queja constante entre los empresarios: ‘unos pocos somos los que pagamos impuestos, hay que ampliar la base’”.
Y expresó que él le agregaba para sí mismo: “Unos pocos pagan impuestos, pero entre esos pocos están los mayores evasores”. En ese sentido, el gobernante expresó que “poner las reglas claras para todos es algo que no podemos permitirnos que retroceda”.
El presidente ejecutivo de la Asociación Nacional de Industriales (Andi), Fernando García, reconoció por su parte que, “efectivamente, hemos visto una ampliación a la base tributaria, lo cual es importante, ya que los hondureños debemos entender que el pago de impuestos es un deber que cada uno tiene y si estos recursos son bien administrados, de esa manera se puede generar progreso y desarrollo para todos”.
El empresario opinó que es importante ir aumentando la base tributaria y a la par revisar que las cargas que tiene el país sean competitivas, que no los saquen de competencia respecto al resto de la región y el resto de los competidores que tiene cada uno de los sectores económicos.
En ese sentido, dijo que “hay que hacer el análisis de la carga versus nuestra competencia y pagar lo que corresponde, y si hay algún tipo de diferencia o de situación en la cual no hay un acuerdo, que se tenga el procedimiento correcto para dirimir esas diferencias de acuerdo a derecho”.
Para la titular del SAR, la clave para reconocer “los enormes avances que como Gobierno hemos generado es ver hacia atrás y analizar de dónde venimos y ver ahora dónde estamos y hacia dónde debemos transitar”.
“No nos podemos dar el lujo de retroceder jamás. Hoy por hoy, Honduras es reconocido a nivel internacional por la solidez de su administración tributaria, una administración nueva; apenas tenemos 4 años de fundación”, dijo.
Asimismo, Guzmán destacó que el SAR tiene estándares de primer nivel, un proceso de reclutamiento y selección de su talento humano a través de procesos transparentes, realizado mediante concursos.
También agregó que la institución ha realizado toda una reingeniería de procesos a fin de facilitar y bajar el costo del cumplimiento de las obligaciones para todos los contribuyentes.
Las proyecciones de recaudación tributaria del presente año en el Presupuesto General de la República rondan los 96 mil 388 millones 129 mil 631 lempiras.
El nuevo proyecto que está impulsando el SAR es la adquisición del nuevo servicio del sistema de información integrado del SARA.
Para los empresarios hondureños es importante trabajar en la puesta en marcha de una oficina de defensoría del obligado tributario para que, cuando haya situaciones de falta de consenso entre la autoridad y el obligado tributario, se tenga ese espacio para dirimir esa controversia.