Tegucigalpa – El cardenal hondureño, Óscar Andrés Rodríguez, hizo el domingo 3 de abril un llamado a la feligresía hondureña para que en el tiempo de cuaresma hagan una buena confesión, se conviertan a Dios y salgan del «huracán del odio y del rencor».
«Tristemente nos encontramos en el huracán de odio, rencores, pleitos, falta de comprensión y de perdón, juzgamos a todo mundo, tiramos piedras a todo el que podemos, pero debemos de salir de ese huracán», señaló el cardenal Rodríguez en la homilía dominical oficiada en la Basílica Menor de Suyapa en Tegucigalpa.
El arzobispo también de la arquidiócesis de Tegucigalpa, apuntó que los hondureños no podrán decir que son verdaderos cristianos sino viven el Evangelio y se convierten en mejores seres humanos.
El jerarca religioso hondureño llamó a la población para que oren y reflexionen a pocos días de vivir la pasión, muerte y resurrección de Jesús.
«Terminando nuestro camino cuaresmal es bueno que oigamos estas palabras: yo tampoco te condeno, y sentirnos liberados de muchos sentimientos de culpa, de indignidad que a veces estamos sumergidos», expresó el cardenal Rodríguez, en referencia al pasaje de la mujer que fue sorprendida en adulterio y que no fue condenada.
En Honduras constantemente se dan mensajes de odio y confrontación entre partidos políticos, funcionarios y exfuncionarios, por lo hecho o no dejado de hacer en gobiernos, refirió.
De igual manera, el odio se ve en los actos de violencia, de familias que se confrontan por herencias, celos entre parejas, y por los homicidios en muchos casos dantescos que se atribuyen a las maras y pandillas.
