Tegucigalpa.- Un plan piloto para acelerar los procesos de deportación de inmigrantes indocumentados en Estados Unidos fue diseñado por el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, siglas en inglés), medida que afectará directamente a 56 mil inmigrantes.
Esos inmigrantes sin permiso en la Unión Americana residen en diez grandes ciudades y están esperando de las cortes una respuesta favorable a sus solicitudes de asilo.
Igualmente, el plan afecta los permisos de trabajos otorgados a los inmigrantes y les dejan sin tiempo de asentarse en Estados Unidos.
La medida del ICE tiene el objetivo de acelerar los procesos en los tribunales de inmigración que solicitaron asilo para asustar a los migrantes sin documentos que buscan emprender su viaje desde los países del Triángulo Norte de Centroamérica, es decir Guatemala, El Salvador y Honduras.
Al respecto, los abogados defensores refutan que el calendario es muy ajustado para preparar el caso y obtener resoluciones favorables que se traduzcan en obtención de documentos de países extranjeros.
El programa representa una de las formas de la administración del presidente Donald Trump para reducir la llegada de migrantes centroamericanos a la frontera entre México y Estados Unidos.
