Nueva York. – El exjefe de la Policía Nacional de Honduras y recién extraditado, Juan Carlos “El Tigre” Bonilla, fue presentado este miércoles ante la jueza Katherine Parker en la Corte del Distrito Sur de Nueva York, donde enfrenta cargos por delitos de narcotráfico.
En ese sentido, la jueza federal fijó la siguiente audiencia de Bonilla, para el viernes 10 de junio.
Según el medio Inner City Press, “El Tigre” Bonilla llegó con una camisa blanca a la sala y fue acompañado de un abogado público designado por la Corte luego de presentar información financiera que señalaba que no podía pagar uno propio.
También estuvieron dos fiscales que participaron en la audiencia de lectura de cargos desarrollada ayer contra el expresidente Juan Orlando Hernández.
La jueza preguntó a la Fiscalía si piden la detención de Bonilla, a lo que éstos respondieron que “sí”, en ese sentido, programó para el 10 de junio de 2022 la audiencia de presentación de cargos ya con la presencia del abogado defensor proporcionado por EEUU.
La Fiscalía del Distrito Sur de Nueva York acusa a “El Tigre” Bonilla por tres cargos: violar la ley y supervisar el envío de múltiples toneladas de cocaína a EEUU, uso de ametralladoras y otras armas y participar en violencia extrema, incluyendo el asesinato de un traficante rival.
El Departamento de Justicia de Estados Unidos, emitió un comunicado este miércoles sobre la extradición del exdirector policial, reiterando sus acusaciones por narcotráfico, tráfico de armas y el asesinato de un narcotraficante, involucrando además a políticos de alto rango, así como a la Policía Nacional en Honduras.
En el amplio escrito, explicó los cargos del exalto jerarca de la Policía Nacional, quien fue extraditado bajo un fuerte dispositivo de seguridad en una aeronave de Administración para el Control de Drogas de los Estados Unidos (DEA), para que en las próximas horas comparezca ante el juez federal Katherine H. Parker.
En el mismo expresó que el exjerarca policial explotó de manera corrupta su posición para proteger y ayudar a las organizaciones narcotraficantes que estaba obligado a desbaratar. Con su apoyo y protección, los asociados de Bonilla se convirtieron en un conducto fundamental para el tráfico de drogas de Centroamérica a Estados Unidos.
Bonilla fue extraditado el martes a Estados Unidos y se convirtió en el hondureño número 30 en seguir ese proceso de entrega a la justicia estadounidense desde que en 2012 se hizo una reforma constitucional para permitir esa posibilidad.