El Mundial de Qatar se jugará entre el 21 de noviembre y el 18 de diciembre (Reuters)
El Mundial de Qatar 2022 será histórico, no sólo por tratarse del primero que se celebra en un país árabe, sino además porque su organización obligó a la reprogramación del calendario futbolístico mundial. Debido a las altas temperaturas que azotan a la región asiática, era imposible disputar el torneo en junio y julio, motivo por el cual se decidió trasladarlo a finales de noviembre y principios de diciembre. De esta manera, todas las ligas y campeonatos de clubes se vieron obligados a adaptar sus fixtures.
Una de las primeras competencias que publicó su calendario fue la Premier League. En noviembre pasado informó que la temporada 2022/23 comenzará el 6 de agosto y se interrumpirá el fin de semana del 13 de noviembre, es decir, una semana antes del arranque del Mundial de Qatar. Esto significa que aquellos futbolistas convocados por su selección que jueguen en la liga inglesa, podrán sumarse a los entrenamientos días antes de que la pelota comience a rodar en Doha.
A ella se sumaron la Serie A, la Bundesliga y la Ligue 1, todas de acuerdo en interrumpir su actividad el fin de semana del 12 y 13 de noviembre. Con esto, queda claro que, salvo una intervención de FIFA, las máximas estrellas del planeta podrán comenzar sus entrenamientos para Qatar apenas una semana antes del arranque del certamen, estipulado para el 21 de noviembre. Por su parte, La Liga de España frenará el 10 de noviembre, pero habrá fecha de Copa del Rey el 12 y 13 de ese mes.
Esto no sólo es un dolor de cabeza para los entrenadores de los combinados nacionales, sino además es un riesgo para los propios futbolistas, quienes no contarán con la habitual pausa que suelen tener antes de cada Mundial. Pero esto no es todo.
En el caso de Argentina, por ejemplo, este jueves se anunció que la final del Trofeo de Campeones se disputará el 6 de noviembre entre Boca Juniors, campeón de la Copa de la Liga, y el ganador de la Lig Profesional que culminará a finales de octubre. El club Xeneize tiene entre sus filas a jugadores como Luis Advíncula y, Carlos Zambrano, que suelen formar parte de las convocatorias de Ricardo Gareca en Perú, que si gana el repechaje ante Emiratos Árabes Unidos o Australia jugará el Mundial.
Con respecto a los torneos de la Conmebol, la final de la Copa Sudamericana se celebrará el 1 de octubre, mientras que la de la Libertadores será el 29 de ese mismo mes, por lo que aquí no habría inconvenientes con el calendario. Lo mismo ocurre con la Champions League en Europa, cuyos último partidos se jugarán el 1 y 2 de noviembre y corresponderán a la fase de grupos ya que las llaves de octavos iniciarán en 2023.
Con este panorama, solo resta esperar que FIFA intervenga para ordenar a los clubes a soltar a los futbolistas convocados para el Mundial de Qatar o que sean los propios equipos los que voluntariamente les permitan a sus jugadores marcharse antes de tiempo para unirse a las prácticas con sus selecciones.
Por el momento, y teniendo en cuenta que las cinco ligas más importantes de Europa se interrumpirán el 13 de noviembre, estrellas como Lionel Messi, Karim Benzema, Sadio Mané, Robert Lewandowski, Cristiano Ronaldo, Kevin De Bruyne, Neymar, Luis Suárez y Raheem Sterling, entre tantas otras, llegarían con lo justo al torneo sin márgen para entrenar.
Lo más grave aún es que los técnicos de las selecciones tampoco contarán con demasiadas pruebas para ver futbolistas en lo que resta del año. La próxima semana se disputarán varios duelos por la ventana de Fecha FIFA, uno de los partidos más atractivos es la Finalissima entre la Argentina e Italia. Días más tarde, se cerrarán los repechajes pendientes rumbo a Qatar 2022 y después de eso, la siguiente fecha FIFA será en septiembre, del 19 al 27 de ese mes. Esa será la última antes del Mundial.
De esta forma, la mayoría de los técnicos deben saber que podrán jugar solamente cuatro partidos de aquí a noviembre y que contarán con su plantel completo apenas seis días antes de partido inaugural de Qatar 2022. Un panorama que preocupa al fútbol mundial.