Había sido instalada en 2002 en la ciudad de Valparaíso.
Por infobae.com
La justicia ordenó a la Armada de Chile que retire un polémico monumento situado en el Museo Marítimo en honor a un oficial que lideró el régimen de Augusto Pinochet. La institución tiene un plazo de 5 días para quitar la estatua del lugar.
Se trata de una escultura en honor a José Toribio Merino, ex jefe máximo de la Armada de Chile e integrante de la Junta Militar que encabezó la dictadura militar desde 1973 a 1990. La imagen fue instalada el 2002 y el recurso judicial presentado por víctimas del régimen, y por el abogado y presidente de la Fundación Memoria Histórica, Luis Mariano Rendón, se fundamenta por la participación que tuvo el oficial en tiempos de tiranía.
En fallo dividido la justicia manifestó que la Armada de Chile al mantener esta estatua incurriría en la ilegalidad al contravenir la garantía de “no repetición” de delitos de lesa humanidad, lo que es uno de los puntos que integran la reparación de las víctimas.
“Si bien no puede desconocerse la condición de ex comandante en Jefe del Almirante Merino, no resulta posible, de igual modo, por ser un hecho histórico, público y notorio, que fue precisamente, en esa calidad que este participó y dirigió las fuerzas navales en contra del gobierno de la época, legítimamente constituido y que, a contar del 11 de septiembre de 1973, se instauró en el país un régimen de facto”, explicó la justicia.
La justicia además explicó que Merino “formó parte como miembro de la Junta Militar responsable de muertes, desapariciones y torturas de innumerables personas, de las cuales, a casi 50 años, los tribunales de justicia siguen conociendo, investigando y sancionando, por contarse entre ellos, delitos de lesa humanidad”.
El fallo dio un plazo de cinco días para que la Armada de Chile retire este monumento desde el Museo Marítimo situado en la ciudad de Valparaíso, a 120 kilómetros del Santiago.
Qué dijo la Armada
En octubre del 2021 la Armada explicó que “es justo y razonable” que la institución “rinda homenaje a un excomandante en jefe por los méritos que estima le corresponden”. Las palabras fueron redactadas por el actual Comandante en Jefe de la Armada, Juan Andrés de la Maza.
“Es justo y razonable que una institución como la Armada rinda homenaje a un excomandante en jefe por los méritos que estima le corresponden, sin perjuicio de las actuaciones políticas que el homenajeado haya debido cumplir en una etapa de nuestra historia, las cuales no aparecen de ninguna manera reflejadas ni ponderadas en su monumento”, explicó el mandamás.
En la defensa, de la Maza explicó que la estatua “se encuentra erigida en un recinto militar”, y que la Contraloría General de la República, en un dictamen, estableció que la imagen no es un “monumento público”. Para la Armada, Merino “se desempeñó como comandante en jefe de la Armada hasta el día 8 de marzo de 1990, fecha en que se acogió a retiro, sin que nunca haya sido condenado por algún delito que impida efectuarle un reconocimiento por la institución a la que perteneció y dentro de un recinto militar que se encuentra a cargo de ella”.