Tegucigalpa. – El presidente del Comité para la Defensa de Derechos Humanos (Codeh), Hugo Maldonado, hizo un llamado al Sistema Nacional de Emergencia 911 para que sus cámaras instaladas en todo el país sirvan para resolver crímenes, no para registrar accidentes de tránsito, esto tras la masacre ocurrida en el bulevar Morazán, de Tegucigalpa, Francisco Morazán.
«El elemento fundamental de las cámaras del 911 son para contrarrestar la ola de violencia y criminalidad que vive el país (…) no podemos seguir en manos del crimen organizado», señaló.
Asimismo, consideró que la juventud seguirá siendo presa fácil del crimen organizado si en Honduras no se crean las oportunidades laborales y académicas para este grupo de la población.
«Puede existir la mejor estrategia en seguridad, pero si no tenemos un despegue económico y nos seguimos muriendo de hambre vamos a estar a merced de la delincuencia», manifestó Maldonado.
El presidente del Codeh también instó a los políticos a trabajar seriamente para evitar que estos lamentables sucesos sigan ocurriendo.
Alrededor de las 5:00 a.m. de este jueves 14 de julio cuatro personas fueron asesinadas cuando salían de una discoteca ubicada en un edificio comercial del bulevar Morazán, en la capital.
Los ahora occisos fueron identificados como Said Lobo (hijo del expresidente Porfirio Lobo Sosa), Luis Zelaya (sobrino del exgeneral Romeo Vásquez), Norlan Rodríguez y Salomón Vásquez (sobrino diputado Walter Chávez).
La información recabada señala que estaban saliendo del recinto a bordo de varios vehículos cuando fueron interceptado por sujetos con indumentaria oficial.
Aparentando que se trataba de un operativo, los malhechores hicieron bajar de los automotores a las víctimas para ejecutarlos con armas de fuego.
«No fueron pelagatos los que mataron a estos muchachos (…) fue todo un operativo y eso tiene que investigarse y no dejarse como estadística», expresó Maldonado.
Las cifras manejadas por el Codeh establecen que en lo que va del año 2022 ya se registran 30 masacres que han dejado 111 personas muertas.