Desde este domingo 7 de agosto, Gustavo Petro Urrego se convertirá en el presidente número 60 de la historia de Colombia para el periodo 2022-2026, en reemplazo de quien hasta hoy fue el primer mandatario de los colombianos, Iván Duque Márquez.
Por Semana
A pesar de tener una casa a las afueras de Bogotá, Petro, como es costumbre con los jefes de Estado, residirá a partir de hoy en la Casa de Nariño, ubicada en el centro de la ciudad, a escasos metros del Congreso de la República.
Desde 1908, en las postrimerías del gobierno del general Rafael Reyes, la Casa de Nariño se convirtió en la sede presidencial de Colombia, la cual estaba ubicada anteriormente en el Palacio de San Carlos.
En 1972, bajo la administración de Misael Pastrana Borrero, se amplió la construcción, dejando el cuerpo frontal sobre la carrera 7a, que conserva su anterior fisonomía, y donde está el Salón Amarillo. La obra fue adelantada en casi su totalidad durante el gobierno de Alfonso López Michelsen y terminada bajo el mandato de Julio César Turbay Ayala.
A un lado de la Casa de Nariño, sobre la carrera octava, se yergue solitaria la torre del Observatorio Astronómico, construido por el sabio José Celestino Mutis entre mayo de 1802 y agosto de 1803. Al frente, presidiendo el conjunto, la estatua de bronce de Antonio Nariño, que vino en peregrinaje de la Plazuela de San Victorino, donde se erigió en 1910.
De acuerdo con Roberto Velandia, de la Academia Colombiana de Historia, este monumental edificio de líneas grecoromanas está revestido de piedra tallada y labrada, así como semeja una fortaleza simbólica de gobierno, fuerza y poder.
Para leer la nota completa, aquí