Tegucigalpa – América Latina y el Caribe han experimentado una disminución en el apoyo ciudadano a la democracia como la mejor forma de gobierno. En el caso particular de Honduras, solo el 30% de los hondureños estaban satisfechos con la forma en que funciona la democracia, de acuerdo al Barómetro de las Américas 2021. El porcentaje anterior significa que solo tres de cada 10 hondureños están complacidos.
●El informe del Barómetro de las Américas corresponde al año 2021 y no evalúa la actual administración
●El nivel de satisfacción con la democracia de los hondureños es el más bajo desde que comenzó a realizarse la encuesta en 2004
●Solo 22% de hondureños percibe que sus derechos básicos están bien protegidos por el sistema político
Vale señalar que los resultados del informe corresponden al año 2021 y no evalúa la actual administración. Los resultados del sondeo fueron presentados este miércoles por la Federación de Organizaciones No Gubernamentales para el Desarrollo de Honduras (Foprideh), en colaboración con la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo (USAID), LAPOP Lab y la Universidad de Vanderbilt.
La encuesta, que se realiza anualmente y recoge la opinión de ciudadanos de la región desde 2004, destaca que el apoyo a la democracia no ha recuperado los niveles registrados hace una década.
Además evidencia que si bien es menos probable que los ciudadanos toleren una toma del poder por parte de los militares que hace una década, es mucho más probable que consientan un Poder Ejecutivo que gobierne sin el Poder Legislativo en situaciones de crisis.
La proporción de adultos en cada país de la región que expresan su apoyo a la democracia varía de 46% en Haití hasta 80% en Uruguay. En todos los países, con la excepción de cuatro (incluyendo Honduras), la mayoría expresa su apoyo a la democracia en lo abstracto.
Menos de la mitad de los hondureños (49%) estuvo de acuerdo con la proposición de que, a pesar de sus problemas, la democracia es la mejor forma de gobierno, muy por debajo de la media regional de 61%.
Lo más preocupante es que casi 45% de los hondureños consultados están dispuestos a apoyar un golpe militar en condiciones de alta corrupción, mientras el promedio regional es de 40%.
Cabe señalar que el porcentaje de hondureños que apoyan un golpe de Estado en condiciones de alta corrupción ha disminuido un 10% desde que alcanzó su nivel más alto en 2008; un año antes del golpe de 2009 esta cifra se situaba en 55%.
Sin embargo, solo 20% apoya a un líder fuerte que no cumpla con las reglas para conseguir resultados.
Por otro lado, 26% de los hondureños está dispuesto a justificar el cierre del Congreso Nacional por parte del presidente si el país enfrenta «tiempos difíciles», lo que representa un aumento del 17% desde 2010.
Las deficiencias en el Estado de derecho afectan la confianza y el apoyo a la democracia: quienes perciben y experimentan el fracaso de las instituciones confían menos en los miembros de su comunidad y en el gobierno nacional, y apoyan menos la democracia.
Desconfianza en los políticos
En general, los ciudadanos de la región están dispuestos a sacrificar las elecciones en favor de un sistema que garantice ingresos y servicios básicos, pero están menos dispuestos a sacrificar la libertad de expresión.
Solo 22% de los hondureños cree que el sistema político protege los derechos básicos, ubicando al país entre los tres países con menor porcentaje.
Una mayoría de hondureños (53%) prefiere un gobierno que garantice un ingreso y servicios básicos, aunque no se pueda elegir a las autoridades. No obstante, solo 34% prefiere sacrificar el derecho de expresión libre a cambio de ingreso y servicios básicos.
La voluntad de sacrificar elecciones por servicios básicos se refleja también en el bajo nivel de confianza que expresan los hondureños por las elecciones. Solo 23% dice tener confianza en las elecciones, un porcentaje que se ha mantenido bastante estable desde 2004, con la excepción de 2014 y 2016, cuando 35% y 34%, respectivamente, expresaban confianza en las elecciones.
Los resultados sitúan a Honduras entre los países con más bajo nivel de confianza en las elecciones, solo Colombia expresa niveles de confianza más bajos, y muy por debajo de la media regional del 42%.
El nivel de confianza en las elecciones en Honduras refleja el cuestionamiento al sistema electoral hondureño que organizaciones de la sociedad civil e internacional han realizado, particularmente a raíz de las elecciones presidenciales del 2017 cuando el expresidente Juan Orlando Hernández logra la reelección a pesar del cuestionamiento al sistema electoral.
Corrupción, delincuencia y migración
La corrupción es uno de los problemas más graves que enfrenta el sistema político hondureño. Sobre todo, durante los últimos 12 años, Honduras ha padecido de gobiernos con alto niveles de corrupción involucrando a altos funcionarios de Estado; especialmente en casos de narcotráfico, lavado de dinero y malversación de fondos públicos.
Los resultados del Barómetro de las Américas 2021 indican que una gran mayoría de hondureños percibe que la corrupción está generalizada entre los actores políticos. Un 68% piensa que la mitad o más de los políticos están involucrados en corrupción. Este nivel ha aumentado desde 2016, cuando el porcentaje era 59%.
Un 14% de encuestados en Honduras dicen haber sido víctimas de solicitud de soborno por parte de policías y empleados públicos durante el año previo, lo que refleja niveles de victimización por corrupción por encima de la media regional.
En cuanto a la medición de victimización por delincuencia, 25% de hondureños dice haber sido víctima de un acto de delincuencia en el último año y 42% asegura sentirse inseguro en el barrio donde vive.
Por otra parte, la intención de emigrar en Honduras ha aumentado 16 puntos porcentuales desde 2018. El 54% de hondureños expresan el deseo de irse a vivir o trabajar al extranjero.
A las personas que reportaron tener intenciones de irse a vivir o trabajar al extranjero se les preguntó dónde pensaban ir y Estados Unidos es la opción más clara para la mayoría. Más de tres cuartas partes de los hondureños con intenciones de emigrar esperan llegar a EE. UU.
Entre los principales impulsores para las intenciones de emigrar en 2021, figuran: falta de oportunidades económicas (55%), falta de oportunidades educativas (15%), reunificación familiar (4%), inseguridad y violencia (4%), corrupción (1%) y otras razones (21%)
Además, estos hallazgos apuntan a la inseguridad alimentaria como un impulsor más fuerte de la emigración en 2021. En el caso de hondureños con mayor probabilidad de emigrar, se identificaron quienes sufren de inseguridad alimentaria, jóvenes (entre 18 y 25 años) y hombres.
USAID es la Agencia del Gobierno de los Estados Unidos que ofrece asistencia a más de 100 diferentes países alrededor del mundo. USAID tiene más de 60 años de trabajar en sociedad con el gobierno y pueblo de Honduras.
Los programas de la USAID han contribuido a combatir la corrupción, promover la transparencia reducir la pobreza y crear oportunidades para los hondureños mediante programas en salud, educación, estimulación de la economía, medio ambiente, infraestructura, y gobernabilidad y democracia.
LAPOP es un proyecto acogido por la Universidad de Vanderbilt en Nashville, Tennessee. Vanderbilt es una universidad dedicada a la investigación, la cual ha sido líder en el estudio de América Latina y el Caribe por más de 60 años.
En esta institución, un dedicado equipo de profesores, empleados, investigadores postdoctorales y estudiantes de doctorado trabajan todo el año en el diseño y análisis de encuestas de opinión pública.
El Barómetro de las Américas es un proyecto de investigación por encuestas realizado periódicamente en 34 países del hemisferio occidental. Las encuestas son representativas a nivel nacional en cada país, con un cuestionario común y módulos específicos en cada país.
El Barómetro de las Américas es la única encuesta comparativa científicamente rigurosa de valores y comportamientos democráticos que cubre a todos los países independientes de América del Norte, Centroamérica y Sudamérica, así como a un número significativo de países del Caribe.
El Barómetro de las Américas mide actitudes, evaluaciones, experiencias y comportamientos en las Américas utilizando muestras probabilísticas nacionales de adultos en edad de votar.
Los métodos de estandarización y un cuestionario común permiten comparaciones válidas entre países y a lo largo del tiempo sobre temas que incluyen la economía, el estado de derecho, la capacidad del estado, la confianza en las instituciones, los valores individuales, la corrupción, la seguridad y más.
Más información sobre el Barómetro de las Américas se encuentra disponible en: https://www.vanderbilt.edu/lapop/regional-reports.php