Tegucigalpa – El oficial de la gerencia de política económica del Consejo Hondureño de la Empresa Privada (Cohep), Obed García, informó que, hasta agosto de este año, las presiones inflacionarias se mantienen con fuerza por varios factores.
García refirió que el fenómeno económico persiste por precios de los alimentos, los cuellos de botella en la producción mundial y el drástico aumento en el precio de la materia prima.
Precisó que para Honduras la inflación fue de 10.86 por ciento, reflejando una desaceleración con los meses anteriores.
Sin embargo, se prevé aún una tendencia alcista, dado que el 47.5 por ciento de la inflación es importada, según el Banco Central de Honduras (BCH).
Para la producción nacional, apuntó que los resultados acumulados al primer semestre del año indican un ritmo de crecimiento positivo; pero inferior a los niveles de actividad económica del año anterior.
Apuntó que el BCH, cuando se refirió a un contexto económico mundial menos favorable y el incremento de los precios de los bienes y servicios afectan parcialmente el ingreso disponible y la demanda interna, derivando en una disminución del siete por ciento en las ventas totales en comparación a junio.
Lo anterior, son claros indicadores de que la económica avanza por una ralentización. Sobre las exportaciones, reveló que suman tres mil 436.5 millones de dólares y el volumen de exportación creció en un 37 por ciento en términos interanual.
“El 53 por ciento del volumen de exportación es dirigido a Estados Unidos; un 26 por ciento hacia los países de Centroamérica y el 21 por ciento restante al resto del mundo”, desmenuzó.
En cuanto a las reservas internacionales netas, detalló que registraron una disminución de 334 millones de dólares; por su parte, las remesas suman cinco mil 419 millones, un 20 por ciento más a lo observado en agosto del año pasado y el tipo de cambio en términos interanuales ha mostrado una depreciación de 2.49 por ciento.
