Brasil realizará una “consulta profunda” a la FIFA sobre el campo del estadio 974, dijo este martes el coordinador de la selección brasileña, Juninho Paulista, luego de que los jugadores criticaran el “mal” estado de la grama.
“Hicimos (una consulta ayer lunes), pero vamos a hacer una consulta más profunda con la FIFA”, dijo en una rueda de prensa en el estadio Grand Halam, sede de entrenamiento de los pentacampeones en Doha.
Sin el lesionado Neymar, Brasil venció 1-0 a Suiza la noche del lunes en ese estadio de la capital catarí y se clasificó a octavos de final a falta de una fecha para el cierre del Grupo G, que lidera con puntaje perfecto tras dos salidas. El viernes enfrentará a Camerún en Lusail.
En caso de que termine puntera, la ‘Canarinha’, una de las grandes favoritas al título, disputará el choque de la siguiente fase en ese mismo recinto deportivo contra el segundo colocado del Grupo H.
El Portugal de Cristiano Ronaldo, ya clasificado con seis unidades, encabeza esa zona, seguido de Ghana (3), Corea del Sur y Uruguay (un punto cada uno).
“Creemos que para el partido de octavos allá, (la cancha) va a estar más deteriorada porque aún faltan dos juegos por disputarse” en ese recinto, el de Polonia contra Argentina el miércoles y Serbia ante Suiza el viernes, agregó.
“No sé qué podrá hacerse, pero algo tiene que ser hecho para que esté en el nivel que exige una Copa del Mundo”, agregó.
Al término del encuentro contra los suizos, varios jugadores del ‘scratch’ se quejaron del estado del campo del 974, un estadio fabricado a partir de contenedores y otros materiales reutilizados y que será totalmente desmantelado después del torneo.
“El campo está poco tupido, no es bueno para dominar la pelota. Estamos acostumbrados a jugar en Europa en canchas que parecen tapetes, llegamos aquí y le falta pasto, se dificulta. Pero si va a estar difícil para nosotros, va a estar difícil para el adversario también”, dijo el atacante Richarlison.
El lateral izquierdo Alex Telles opinó por su parte que desde el calentamiento se dieron cuenta de que el terreno estaba “un poco extraño”.
“La bola estaba saltando más, estaba corriendo mucho y no nos sentíamos con mucha seguridad” por temor a una lesión, sostuvo.
El volante Bruno Guimaraes consideró que la situación del césped afectó el desarrollo del juego.
“Intentamos anotar de diversas maneras pero el campo nos afectó. Estaba malo, no estaba como esperábamos. Teníamos que dominar bolas que normalmente jugamos a un toque, ahí perdíamos un poco de tiempo. Pero lo importante es que conseguimos los tres puntos”, señaló.
AFP