Washington– Cerca de 50 personas han fallecido en los últimos días en Estados Unidos por el impacto de la gélida tormenta Elliot, que ha dejado intensas nevadas y vientos huracanados en gran parte del país, provocando las Navidades más frías de las últimas décadas.
La zona más devastada es el noroeste del estado de Nueva York, donde las autoridades elevaron este lunes a 27 el número de muertos por el temporal. Los cuerpos fueron hallados en casas, vehículos y en la calle.
La ciudad de Búfalo (Nueva York), fronteriza con Canadá y acostumbrada al frío, ha quedado totalmente colapsada por la nieve y su aeropuerto permanece cerrado.
La gobernadora neoyorquina, Kathy Hochul, dijo que ha sido la «tormenta más devastadora» que se recuerda en la zona y ha pedido a los ciudadanos que eviten conducir por carretera.
Con estos nuevos datos, los medios locales elevan ya el número de decesos por Elliot a cerca de 50 en Estados Unidos, muchos atrapados en vehículos en las carreteras.
Además de Nueva York, se han registrado fallecimientos por el frío o por accidentes en los estados de Colorado, Illinois, Kansas, Kentucky, Míchigan, Misuri, Nebraska, Ohio, Oklahoma, Tennessee y Wisconsin, según los medios locales.
En Ohio, cuatro personas murieron y varias resultaron heridas en un aparatoso accidente en una autopista en el que estuvieron involucrados unos 50 vehículos.
El alcance de la tormenta ha sido casi sin precedentes, extendiéndose desde los Grandes Lagos, cerca de Canadá, hasta el río Grande (río Bravo) a lo largo de la frontera con México.
Más de 200 millones de estadounidenses, alrededor del 60 % de la población, se ha enfrentado a algún tipo de aviso o advertencia relacionado con el clima invernal y las temperaturas cayeron drásticamente por debajo de lo normal desde el este de las Montañas Rocosas hasta los Apalaches.