Tegucigalpa – Este viernes, muchos hondureños se apresuraron una abarrotar las terminales de autobuses en las principales ciudades del país para poder viajar a las zonas rurales para celebrar el fin de año.
Según los informes de prensa locales, se espera que haya más desplazamientos en comparación con los festejos del 24 y 25 de diciembre.
María, una señora que viajó de Tegucigalpa a una aldea del departamento de Olancho en un autobús, comentó que iba preparar nacatamales a su lugar de origen.
Al igual que María, decenas de adultos mayores viajan para ayudar a preparar la celebración en sus comunidades.
Los jóvenes también viajan como parte de tradiciones familiares. La ruta que conduce de Tegucigalpa al norte y occidente del país fue una de las que mostró el alcalde afluencia el viernes.
Es importante mencionar que los burócratas tienen asueto el lunes 2 de enero, por lo que pueden prolongar sus estancias en las zonas rurales.
En cambio, el sector privado no ha otorgado asueto debido a que los festejos de fin de año caen en fin de semana.
A pesar de esto, muchos hondureños han ajustado sus horarios y han viajado desde este viernes.