Tegucigalpa – Tras un intento fallido el 25 de enero, los 128 parlamentarios hondureños aún no logran ponerse de acuerdo sobre la elección de 15 nuevos magistrados de la Corte Suprema de Justicia (CSJ), que debía realizarse este viernes.
La falta de consenso se debe a la renuencia de los tres partidos con mayor representación en el parlamento, Libertad y Refundación (el oficialista Partido Liberal), el Partido Nacional y el Partido Liberal, a abandonar su objetivo de elegir jueces. . en su interés a la Corte Suprema.
Los diputados libres (50) creen que su partido merece una mayoría de magistrados y le gustaría llegar a 8 en principio.
El Partido Nacional, primera fuerza política con 43 diputados, seguido del Partido Liberal con 22, apuesta por tres mayorías con cinco magistrados cada uno, excluyendo al Partido Salvador de Honduras (PSH, con 10), aunque inicialmente no pretendía nada, ahora apuestan por al menos uno.
Los jefes de bancada de los cuatro partidos han reiterado este jueves que no han logrado acuerdos, y que se mantienen varias propuestas, que no todos aceptan.
La ambición política como raíz del conflicto en la designación de magistrados en Honduras
La ley requiere que el parlamento elija a 15 nuevos magistrados el 25 de enero por un período de siete años, pero si no se llega a un acuerdo, los magistrados salientes permanecerán en el cargo hasta la elección.
Según el diputado del PSH Carlos Umanja, la raíz del problema es que los Liberales, Nacionalistas y Libres no quieren ceder en sus ambiciones de controlar la CSJ, buscan una «repartición» del poder en este país.
Se requiere una mayoría calificada de 86 votos en el parlamento de 128 escaños para elegir un nuevo magistrado.
Los liberales, que no tienen mayoría en el congreso, necesitan algunos votos del Partido Nacional para lograr la mayor representación en el Tribunal Supremo.
Hasta ahora no se vislumbra un acuerdo entre Libre, cuyo coordinador general es el expresidente Manuel Zelaya, derrocado el 28 de junio de 2009, y el Partido Nacional, su más enconado adversario político.
Aunque Libre acusa al Partido Nacional de haber gobernado entre 2010 y 2022 mediante fraude y de narcotráfico, analistas no descartan un eventual acuerdo de última hora entre ambos para «repartirse» el Poder Judicial.
La diputada Silvia Ayala, de Libre, dijo este jueves a periodistas que la elección de los magistrados no es cuestión de números para repartirse un poder, sino de garantizarle a los hondureños un sistema judicial creíble y que no sea controlado por el Partido Nacional, al que acusa de seguir con esa pretensión.
De los 15 actuales magistrados, el Partido Nacional tiene el control con 8, mientras que el Liberal cuenta con 7.
El jefe de la bancada del Partido Nacional, Tomás Zambrano, considera que la mejor propuesta es la de que los tres partidos con mayor representación tengan cinco magistrados cada uno.
Además, los diputados del Partido Nacional afirman que si Libre llegara a controlar la CSJ, llevaría al país a una asamblea nacional constituyente y al comunismo.
Hasta este jueves al mediodía, tiempo local, el presidente del Parlamento, Luis Redondo, no había convocado a la sesión del viernes, como está previsto.
La sociedad hondureña y la comunidad internacional siguen de cerca el proceso y ha venido exigiendo que se elija a los mejores magistrados para que el Supremo sea transparente y creíble, lo que siempre le ha faltado al sistema judicial del país centroamericano.
Los magistrados serán electos entre una lista de 45 postulantes entregada al Parlamento en enero por una Junta Nominadora, aunque no todos los mejor evaluados están siendo tomados en cuenta por los tres partidos mayoritarios.
Con información de EFE