Tegucigalpa – Tegucigalpa y San Pedro Sula siguen entre las ciudades más violentas del mundo, pese a mejorar sus posiciones en el infamante ranquin de las 50 urbes más conflictivas del planeta, según la medición presentada este lunes por el Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública y la Justicia Penal de México.
Las principales ciudades de Honduras se ubicaron en 2021 en el puesto 32 (Tegucigalpa) y 39 (SPS), pero ahora bajaron a los lugares 42 y 45, respectivamente, del ranquin de 2022.
La información contrasta con el reciente informe publicado por InSight Crime, donde muestra cuáles son los países con las tasas más altas de homicidio en América Latina y el Caribe en 2022.
La investigación señala que los enfrentamientos entre bandas criminales por las disputas del control del negocio de la droga siguen siendo una de las principales causas de la violencia en la región.
En 2022, Honduras continuó ubicándose como el país más violento de Centroamérica, con una tasa de homicidios de 35.8 por 100 mil habitantes, según cifras del gobierno.
Sin embargo, el país redujo los homicidios en un 12.7 por ciento, en comparación con 2021. El gobierno no ha registrado un número tan bajo de muertes desde 2006, según un comunicado del Ministerio de Seguridad.
La presidenta Xiomara Castro generó grandes controversias hacia finales del año, tras implementar una ofensiva contra las pandillas que permitió el arresto de más de 652 presuntos pandilleros y el desmantelamiento de 38 pandillas.
Muchas de las muertes violentas en Honduras se atribuyen a bandas que se dedican al microtráfico y la extorsión. El sector del transporte de Honduras ha sido particularmente golpeado por la extorsión y la violencia concomitante, y al menos 60 trabajadores de dicho sector perdieron la vida en 2022.
Si bien el Estado de excepción promulgado por Castro va dirigido a las pandillas que llevan a cabo esquemas de extorsión, es muy pronto para determinar el impacto que dicha estrategia tendrá sobre la tasa de homicidios del país, señaló InSight Crime.