Tegucigalpa – En las últimas horas, la precandidata presidencial por el Partido Libertad y Refundación (Libre), Rixi Moncada, hizo declaraciones contundentes sobre la importancia de la justicia y la necesidad de un sistema judicial independiente y eficaz en Honduras.
En su intervención ante los medios, Moncada enfatizó que lo crucial no es quién preside las salas de la Corte Suprema de Justicia (CSJ), sino garantizar que se haga justicia de manera imparcial y transparente.
Subrayó que la preocupación principal de la sociedad hondureña es que el sistema judicial actúe con independencia y eficiencia en la administración de justicia.
La precandidata se refirió al reciente veredicto de culpabilidad del expresidente Juan Orlando Hernández por cargos de narcotráfico en una corte de Nueva York, destacando que este evento pone de relieve la necesidad de fortalecer las instituciones y asegurar que estén al servicio del pueblo hondureño.
En este sentido, enfatizó que la justicia es un pilar fundamental para el desarrollo y la estabilidad del país.
Moncada instó al Ministerio Público y a la CSJ a cumplir con su deber de investigar, presentar requerimientos fiscales y juzgar a aquellos que han cometido delitos.
Hizo hincapié en que la CSJ, en particular, tiene pendientes casos de gran relevancia nacional, como los relacionados con la reelección presidencial y las Zonas de Empleo de Desarrollo Económico (ZEDEs), que requieren pronta resolución para garantizar la transparencia y el cumplimiento de la ley.
En cuanto a la independencia del sistema judicial, Moncada subrayó que esta no depende únicamente de las instituciones del Estado, sino también de la integridad y el compromiso ético de los fiscales, jueces y magistrados.
Enfatizó que la independencia es un valor personal que debe guiar el ejercicio de la función judicial, sin influencias externas o políticas.
En relación con sus aspiraciones presidenciales, Moncada expresó su compromiso con la instauración de un Estado socialista democrático en Honduras, basado en principios de justicia social y equidad.
Destacó su confianza en la capacidad del pueblo hondureño para mejorar sus condiciones de vida y promover un cambio positivo en la sociedad.
En última instancia, la precandidata reafirmó el compromiso de Libre como una causa nacional que busca transformar Honduras en un país más justo y equitativo, y advirtió que aquellos que se aparten de esta misión están relegados a ser considerados “cachurecos”, es decir, defensores del statu quo y la corrupción.
