Tegucigalpa – En Honduras, el análisis político actual sugiere una tensión creciente dentro del Partido Libertad y Refundación (Libre), particularmente entre los miembros de su propia estructura y la cúpula del partido, según el abogado y analista político Héctor Pérez.
Este descontento se evidencia en las recientes declaraciones del precandidato Rasel Tomé, quien abiertamente cuestionó la imparcialidad de la presidenta Xiomara Castro hacia Rixi Moncada, aparentemente favorecida por el oficialismo para las próximas elecciones internas.
Pérez critica la falta de democracia interna en Libre, argumentando que el partido opera bajo una «dictadura interna» que no permite la disidencia ni el debate abierto entre sus miembros.
Citó varios ejemplos de figuras prominentes dentro del partido que han enfrentado dificultades similares, destacando la situación de Tomé como un reflejo de un problema más amplio.
El analista también sugiere que Tomé debería considerar abandonar Libre, siguiendo el ejemplo de Jorge Cálix, dado el claro apoyo gubernamental hacia Moncada que, según Pérez, limita severamente las oportunidades para otros candidatos dentro del partido.
Esta situación, advierte Pérez, podría debilitar la legitimidad de las primarias y perpetuar las divisiones internas.
El escenario plantea interrogantes significativos sobre la equidad y la transparencia dentro de Libre, un tema crucial en un momento político tan importante para Honduras.