Tegucigalpa. – Las revelaciones del ex líder de Los Cachiros en el cuarto día de juicio contra el narcotraficante hondureño, Geovanny Fuentes, también salpicaron al expresidente Manuel Zelaya y al actual designado presidencial Ricardo Álvarez, quienes supuestamente recibieron miles de dólares en sobornos, con el objetivo de que avalaran prácticas ilícitas del crimen organizado en el país.
En ese sentido, el designado presidencial, Ricardo Álvarez, salió al paso para contar su versión de los hechos, pues según el testimonio del cachiro, él percibió unos 500 mil dólares en 2012 para que evitara legalizar la extradición.
Mediante sus redes sociales, el actual precandidato a diputado por el movimiento Juntos Podemos de Mauricio Oliva, negó cualquier vínculo o recepción de dinero de procedencia ilícita por parte de Devis Rivera o cualquier otra persona acusada de narcotráfico.
Manifestó que no tiene nada que ocultar y que está dispuesto a comprobar la legalidad de sus ingresos y así aclarar cualquier tipo de señalamiento.
“Pongo a disposición todos mis bienes, estados financieros y cuentas bancarias, que no son muchas, dicho sea de paso”, aseveró.
No obstante, reconoció que en algún momento pudo coincidir con “alguien que no goza de buena reputación, sin saber de quien se trataba”, pero que ese no es motivo para considerar que obtuvo coimas de parte de capos de la droga para financiar sus campañas políticas.
