El primer ministro británico, Boris Johnson, alista su renuncia, pero los tiempos todavía no están definidos y la carrera por el liderazgo del Partido Conservador no tiene a un claro favorito para suceder al premier.
Es precisamente la falta de un sucesor directo lo que ha hecho que los diputados se hayan mostrado dubitativos a la hora de presionar en mayor medida a Johnson para dejar el cargo; no existen potenciales candidatos.
Las normas indican que los candidatos que se postulen para el liderazgo -podría haber muchos- deben ser nominados por otros dos diputados del Partido Conservador. Los parlamentarios del oficialismo celebran entonces varias rondas de votaciones para reducir el número de candidatos. Cada vez se les pide que voten por su candidato favorito en una votación secreta y la persona con menos votos es eliminada.
Rishi Sunak
El ministro de Finanzas, Rishi Sunak, primer hindú en ocupar el cargo, fue uno de los dos destacados ministros que dimitió el martes. Había sido en su día el gran favorito para suceder a Johnson, pero perdió legitimidad a raíz de una serie de escándalos. Giraban en torno al ventajoso estatuto fiscal de su multimillonaria esposa india, que le permitía evitar pagar millones en impuestos en el Reino Unido, y al permiso de residencia en Estados Unidos que Sunak tuvo hasta el año pasado.
Exanalista del banco Goldman Sachs y empleado de un fondo especulativo, casado con la hija de un magnate indio, Sunak, cuyos abuelos emigraron del norte de India al Reino Unido en la década de 1960, acumuló una importante fortuna personal antes de convertirse en diputado en 2015. Defensor del Brexit, de 42 años, fue nombrado ministro de Finanzas en 2020, un puesto clave en plena pandemia, pero ha sido criticado por hacer muy poco para contrarrestar la asfixiante crisis por el disparado coste de la vida.
La introducción de diversas políticas -como la subida de los impuestos- han hecho que su popularidad caiga en picado entre las filas de los ‘tories’. Además, el ministro se ha visto salpicado por el ‘Partygate’ después de asistir a la fiesta de cumpleaños de Johnson durante el confinamiento. Aún así, su rápida decisión de abandonar el Gabinete podría traducirse en un aumento de su popularidad.
Jeremy Hunt
El ex ministro de Relaciones Exteriores y de Salud, Jeremy Hunt, de 55 años, perdió frente a Boris Johnson en las elecciones al liderazgo conservador de 2019, en las que se presentó como la alternativa “seria”. Desde entonces se considera que ha estado esperando el momento y preparándose para volver a presentarse, construyendo sus apoyos y manteniéndose fuera del gobierno de Johnson.
Compañero de este y del ex primer ministro conservador David Cameron en la Universidad de Oxford, Hunt, que enseñó inglés en Japón y domina el japonés, es presidente de la comisión parlamentaria de Salud.
Tiene una imagen de “tipo simpático”, aunque algunos consideran que le falta carisma. Su figura ha ido perdiendo adeptos dadas sus reservas a dar un paso al frente tras la renuncia de Javid y Sunak.
Liz Truss
Sin pelos en la lengua y muy crítica con los movimientos reivindicativos bautizados “woke”, la ministra de Relaciones Exteriores, Liz Truss, se ha hecho muy popular en las bases del Partido Conservador.
Esta mujer de 46 años, que durante una década trabajó en los sectores de la energía y las telecomunicaciones, fue nombrada jefa de la diplomacia como recompensa por su trabajo como ministra de Comercio Internacional durante la salida británica de la Unión Europea.
En ese puesto, esta gran defensora del libre comercio que votó por permanecer en el UE antes de cambiar de bando consiguió cerrar una serie de importantes acuerdos comerciales posbrexit.
Sajid Javid
El ministro de Salud, Sajid Javid, fue el otro peso pesado del gobierno y el Partido Conservador que renunció el martes en protesta contra el primer ministro.
Hijo de un conductor de autobús inmigrante paquistaní, era un banquero de renombre antes de convertirse en ministro de Finanzas de Johnson. Dimitió en 2020 después de que Downing Street insistiera en elegir a su equipo de asesores y volvió al gobierno hace un año.
Javid, de 52 años, votó en 2016 a favor de la permanencia en la UE por los beneficios económicos que aportaba, pero luego se sumó a la causa del Brexit. El político británico ya intentó hacerse con el cargo en 2016 junto a Stephen Crabb.
Priti Patel
La ministra del Interior, Priti Patel, de 50 años, es la más conservadora de los ministros de Johnson. Firme partidaria del Brexit, también votó en contra del matrimonio entre personas del mismo sexo.
Nació en Londres en el seno de una familia ugandesa-india y ha adoptado una línea muy dura en materia de inmigración. A pesar de sus promesas, el número de inmigrantes que llegan ilegalmente a través del Canal de la Mancha alcanza actualmente niveles récord.
Gran admiradora de la ex primera ministra Margaret Thatcher, y acusada de acoso laboral a sus colaboradores, Patel trabajó en relaciones públicas antes de entrar en política.
Tom Tugendhat
El presidente de la comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara de los Comunes fue el primero en anunciar abiertamente su intención de presentarse si Boris Johnson dimite o es destituido, y podría ser una de las principales opciones para los conservadores moderados.
Exoficial del ejército británico, sirvió en Irak y Afganistán. De padre británico y madre francesa, Tom Tugendhat, de 48 años, es perfectamente bilingüe.
Penny Mourdaunt
Ex ministra de Defensa y actualmente secretaria de Estado de Comercio Exterior, Penny Mordaunt, de 49 años, fue una de las figuras de la campaña a favor del Brexit en 2016 y desde entonces ha trabajado para negociar acuerdos comerciales para el Reino Unido. Considerada como una buena oradora, se estima que podría ser una candidata de unidad, capaz de obtener apoyos de diferentes alas del Partido Conservador.
La diputada se ha convertido en una de las favoritas entre las filas conservadoras, si bien varias encuestas realizadas a miembros del partido a lo largo del fin de semana la sitúan por detrás del actual ministro de Defensa, Ben Wallace.
Mordaunt, que ha apuntado en varias ocasiones a Downing Street pero fue calificada de desleal cuando mostró su apoyo a Jeremy Hunt cuando este trató de suceder a May en 2019, ha sido una de las figuras más críticas con el escándalo de las fiestas de Downing Street en plena pandemia.
Suella Braverman
Fue fiscal general y pidió la renuncia de Johnson con la intención de postularse si se concretaba. Su rechazo hacia el primer ministro ya era conocido, pero no había renunciado a integrar el gobierno.
Ocupa su cargo desde febrero de 2020 y era legisladora desde cinco años antes. “Sería un gran honor”, dijo al ser consultada sobre sus intenciones de ocupar el máximo cargo.
Nadhim Zahawi
El ministro de Educación ha emergido como uno de los favoritos dada su trayectoria en el seno del Gobierno.
Zahawi sorprendió a sus compañeros ‘tories’ cuando se encargó de la gestión de vacunas en el marco de la pandemia y ha sabido paliar la polémica en materia educativa heredada de su predecesor, Gavin Williamson.
El martes fue nombrado titular de Finanzas. Este jueves, se sumó a quienes pidieron al primer ministro que se fuera. “Sabe en su corazón qué es lo correcto, váyase ahora”, escribió en una carta publicada en Twitter.
Otros nombres
El nombre de Matt Hancock, exministro de Sanidad, también figuraba en la terna hasta este jueves. El político conservador ha rechazado presentarse y ha pedido a Johnson dimitir cuanto antes. Para él, su salida es “inevitable” de cara a los próximos días, según informaciones de la cadena BBC. Hancock ha manifestado que lo mejor sería que Johnson abandonará el cargo ya para “iniciar un proceso” para encontrar al próximo primer ministro, aunque ha destacado que sería “lo correcto” permanecer en el cargo hasta que se encuentre un sustituto.
Los nombres de diputados como Mark Harper o Michael Gove también en la terna y podrían dar una sorpresa.
Aunque sería poco común nombrar primer ministro a alguien que carece de experiencia como ministro, algunos diputados creen que sería idóneo contar con un candidato que no se haya visto envuelto en el Gobierno.
Con información de AFP y Europa Press