Tegucigalpa – Jorge Cálix, precandidato presidencial del Partido Liberal, lanzó una fuerte advertencia sobre un posible fraude electoral y criticó directamente a la consejera Ana Paola Hall por respaldar una propuesta del representante del partido oficialista Libre en el Consejo Nacional Electoral (CNE), Marlon Ochoa, a pocos días de las elecciones primarias programadas para este domingo 9 de marzo.
La controversia gira en torno a la propuesta de Ochoa de excluir del primer corte de resultados electorales aquellas actas provenientes de juntas receptoras donde no se haya utilizado el sistema biométrico de identificación. Según esta propuesta, dichas actas solo serían computadas una vez que retornen físicamente a la capital, lo que ha generado suspicacias sobre la transparencia del proceso.
Hall, representante liberal en el CNE, expresó inicialmente su apoyo a esta medida argumentando que «prefiere trabajar lento pero seguro», postura que ha desatado críticas dentro de su propio partido.
Durante su participación en el programa Frente a Frente dirigido por Renato Álvarez, Cálix estableció una polémica comparación con los recientes procesos electorales venezolanos.
El precandidato señaló que Smartmatic, la empresa tecnológica contratada para el proceso electoral hondureño, es «la compañía de Maduro», haciendo referencia a su participación en las elecciones venezolanas donde, según afirmó, «Maduro nunca publicó las actas de la elección del año pasado».
«Es el mismo patrón de fraude que quiere imponer Libre en Honduras», sentenció Cálix, recordando que en Venezuela las actas solo se conocieron por publicaciones de la oposición y nunca por canales oficiales. «Esta práctica pondría a Honduras a las puertas de un fraude que iniciará la ruta a un proceso sin crédito y sin reflejar la realidad de la voluntad popular», advirtió.
El político liberal hizo un llamado directo a la consejera Hall para que «actúe reflexivamente de acuerdo a la doctrina liberal y salvaguarde la integridad del proceso democrático».
Cálix explicó que en Honduras el proceso electoral sigue siendo manual y no electrónico, aclarando que el aparato biométrico únicamente servirá para verificar la identidad del votante. Reconoció que existirán casos especiales donde el sistema biométrico podría no capturar correctamente las huellas dactilares, como ocurre con trabajadores de la construcción o personas que preparan tortillas en grandes volúmenes.
El precandidato especificó que solo en casos donde se desactive deliberadamente el sistema biométrico es cuando no deberían computarse los votos, subrayando que serían situaciones excepcionales y no la regla general que parece promover la propuesta oficialista.
